Las redes sociales y no tanto las drogas, detrás de los problemas de salud mental del alumnado

Ansiedad, depresión o trastornos de conducta alimentaria son algunas de las señales de alerta que el profesorado ha de saber detectar. Una labor que no siempre es fácil y para la que en demasiadas ocasiones se sienten solos.

Y los datos son preocupantes. El 47% de los docentes afirma que se producen problemas de salud mental todas las semanas. Y el 69% considera que estos problemas son mucho más frecuentes tras la pandemia de Covid-19.

Así se desprende del estudio "Salud mental en el alumnado" de Viatris realizado por Metroscopia en el que se han elaborado 500 entrevistas online contestadas en su mayoría, un 74%, por personal docente.

Pero "también hay una mayor concienciación de la comunidad educativa", explica David Rojo, de Metroscopia.

Además, "más de la mitad de los educadores afirma que en los últimos doce meses algún alumno les ha comentado algún problema", añade. Los tres principales problemas de salud mental señalados son la ansiedad (74%), depresión (49%), y trastornos de comportamiento (43%).

Más allá de la salud mental, los dos principales problemas que destacan los encuestados son los problemas de concentración y cansancio (44%) y el acoso escolar (39%).

Este estudio también refleja que al 76% de los encuestados le es difícil identificar estos problemas y al 86% le resulta más difícil ayudar. El 46% es por falta de formación; el 42%, por falta de comunicación entre profesorado y alumnado, y el 38%, por excesiva carga de trabajo.

Además, un 75% del personal del sector de la educación considera que no tienen las herramientas necesarias para ayudar y es que los docentes reclaman un mayor apoyo externo de profesionales de la salud mental.

En cuanto a las causas, los factores que más contribuyen son las redes sociales con el 68%, el uso dispositivos electrónicos 47% y la disfunción en la familia (47%). Les siguen las relaciones con los compañeros (37%), la soledad o el aislamiento (24%) y lejos de los principales problemas están las drogas, con un 23%.

En cambio, los factores que menos influyen de forma negativa en la salud mental de los alumnos estarían la presión académica con un 22% y la falta de recursos económicos (12%).

Con el fin de dar respuesta directa a las crecientes demandas emocionales detectadas en el entorno escolar, Viatris ha presentado “Salud Mental en el Aula: guía práctica para el docente” con herramientas prácticas para gestionar y acompañar los problemas de salud mental del alumnado.

"Son realidades que observamos a diario y que muchas veces no sabemos abordar. Con esta guía hemos focalizado con ejemplos cómo tratar estos casos y llevarlos desde el aula y no vernos solos porque muchas veces nos vemos así, sin ningún tipo de acompañamiento", denuncia Diana Al-Azem, profesora de educación secundaria.

"La enseñanza -prosigue- no solo es impartir la asignatura, sino humanizar la educación y para ello es necesario ser capaces de abordar estas situaciones y por lo menos saber cuándo hay que derivarlas. Necesitamos herramientas sencillas y claras sin tantos tecnicismos".

"La adaptación del lenguaje es crucial. Y eso es lo que se ha intentado con esta guía. Hay que ayudar a entender a los alumnos qué les ocurre. Un cambio de actitud puede ser porque haya algo por detrás", incide Nuria Tur, responsable Clínico de la Unidad de Infancia y Adolescencia del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental, en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid.

Diana Jiménez, psicóloga, psicoterapeuta y neuro-psicóloga educativa, explica que "lo que se quiere con esta guía es ayudar. En ella vienen casos que son reales. Lo importante no es quien tiene razón, todos buscamos lo mismo: proteger la salud mental del alumnado, hay que enfocarnos todos en esto".

En este sentido, "con esta guía hemos intentado que la gente resuelva. Son herramientas prácticas que ayudan, además, a mantener la calma y no desbordarnos emocionalmente como docentes. Se trata de aprender a introducir pequeños cambios para que puedan ayudar al alumnado y darles seguridad", afirma Rosa Molina, médico especialista en Psiquiatría.

Pero "tenemos no solo que actuar una vez suceda, sino prevenir para evitar malos rollos en el aula. Hay que configurar un aula segura", añade Al-Azem.

Un papel en el que no solo es importante el rol de profesores y alumnos, sino también el de los padres. Preguntadas sobre si los padres sobreprotegen a sus hijos, Al-Azem, asegura que así es: "Les sobreprotegemos. Nos tenemos que relajar por un lado y por otro estar presentes y poner límites".

"Venimos del extremo del autoritarismo al de la permisividad. Es que se estresa si... Hay que buscar el equilibrio. Como no estamos presentes como padres, buscamos hacerles la vida fácil y ese es el problema", añade Jiménez.

"Esta guía seguro que va a ser valiosa para las medidas que estamos implementando. La salud mental es una prioridad para la Comunidad de Madrid desde hace más de un lustro y trabajamos en conjunto todas las consejerías. Desde la Consejería de Educación se ha trabajado en protocolos de actuación y estamos reforzando espacios (de diálogo). Existen cauces reglados para la coordinación" de actuación, concluye Mercedes Navío, gerente asistencial de hospitales de la Comunidad de Madrid.