Señales de alerta en la lengua: cambios que podrían indicar enfermedades graves

La observación de la lengua puede ser un recurso muy útil para diagnosticar ciertas enfermedades y trastornos. Este pequeño músculo, que a menudo pasamos por alto, puede reflejar cambios significativos en el estado de salud general del cuerpo y su apariencia puede proporcionar pistas valiosas sobre posibles problemas médicos que podrían estar latentes.

En condiciones normales, una lengua sana suele ser de color rosado y estar limpia. Sin embargo, si notas que tu lengua ha cambiado de color, textura o presenta algún tipo de anomalía, esto podría indicar un problema de salud subyacente. En tales casos, es recomendable visitar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.

¿A qué señales debemos estar atentos?

No subestimes el poder de una simple revisión de tu lengua. Mantener una rutina de chequeos regulares y estar atento a cualquier cambio puede marcar la diferencia en la detección temprana de enfermedades que, si se tratan a tiempo, pueden ser manejadas de manera efectiva. Hace unos meses, el portal especializado “Consejo Dentistas” elaboró una lista detallada con las patologías que pueden tener su reflejo en la apariencia de la lengua y cuáles son los signos a los que debemos estar atentos:

Falta de vitaminas

La falta de vitaminas A, B2 y C puede causar glositis, una inflamación de la lengua que se manifiesta con hinchazón, enrojecimiento y dolor, dificultando el habla y la ingesta de alimentos. Además, este déficit vitamínico, junto con el estrés y cambios hormonales, puede provocar lengua geográfica, caracterizada por grietas que aumentan el riesgo de infecciones si no se mantiene una buena higiene bucal y dieta adecuada.

Anemia:

Una lengua pálida puede indicar anemia, una condición causada por la falta de glóbulos rojos sanos o hierro, lo que impide el transporte adecuado de oxígeno en el cuerpo. Esto puede provocar fatiga, debilidad y mareos. Es crucial consultar a un médico para recibir tratamiento adecuado, que puede incluir cambios en la dieta, suplementos de hierro o tratamientos médicos específicos.

Deficiencia de vitamina B12:

Una lengua enrojecida, inflamada o lisa puede indicar una deficiencia de vitamina B12, esencial para la producción de glóbulos rojos y el funcionamiento del sistema nervioso. La deficiencia puede causar anemia, fatiga, debilidad y problemas neurológicos.

Infecciones fúngicas:

La candidiasis oral es una infección causada por el hongo Candida, que puede multiplicarse debido a un desequilibrio en el cuerpo. Los síntomas incluyen manchas blancas en la lengua y mejillas, enrojecimiento, dolor y dificultad para tragar. Es más común en personas con sistemas inmunológicos debilitados. El tratamiento incluye buena higiene bucal, medicamentos antifúngicos y, a veces, ajustes en la dieta para reducir el consumo de azúcares.

Problemas hepáticos:

La ictericia es un trastorno causado por el exceso de bilirrubina en la sangre debido a problemas hepáticos. Se manifiesta con un tono amarillento en la piel, ojos y lengua, y puede ser un signo de hepatitis, cirrosis o cáncer de hígado.

Enfermedades autoinmunes:

Las enfermedades autoinmunes, como el lupus eritematoso sistémico y la enfermedad de Behçet, pueden causar úlceras dolorosas en la lengua. Estas úlceras son a menudo uno de los primeros signos visibles y requieren atención médica.

Patologías cardiacas y problemas de circulación:

La pigmentación púrpura en la lengua puede indicar problemas cardíacos o circulatorios debido a la falta de oxígeno en la sangre. Este síntoma puede ser una señal de alerta para enfermedades serias, por lo que es crucial consultar a un médico para un diagnóstico y tratamiento adecuados.

Enfermedades del aparato digestivo:

Las úlceras y el reflujo gastroesofágico pueden afectar el color de la lengua, volviéndola grisácea. Las úlceras son heridas en el estómago o intestino delgado que causan dolor. El reflujo es cuando el ácido del estómago sube al esófago, causando irritación. Ambas condiciones pueden cambiar la apariencia de la lengua. Una lengua grisácea puede indicar problemas digestivos, por lo que es importante consultar a un médico.

Infecciones bacterianas:

Las infecciones bacterianas, como la escarlatina o la sífilis, pueden causar cambios en la lengua. Con la escarlatina, la infección se manifiesta con un color blancuzco en la lengua, que podría estar inflamada. Con el tiempo, la lengua puede volverse de color rojo brillante o presentar protuberancias rojas. La lengua de fresa puede durar varios días más que la propia escarlatina. En el caso de la sífilis, pueden aparecer llagas dolorosas.

Consumo excesivo de algunas sustancias

Consumir en exceso tabaco, alcohol, café y té negro puede llevar a una condición llamada "lengua vellosa". Esta afección se caracteriza por una capa negra y una apariencia de vello en la lengua, que se debe a la acumulación de bacterias y células muertas. Afortunadamente, es una condición rara y reversible, una vez se finaliza su consumo.