Enfermedades

El virus del papiloma humano también es cosa de hombres: descubre por qué deberías vacunarte

A pesar de la inclusión reciente de la vacuna en el calendario infantil, la Dra. Herrero subraya la importancia de la vacunación para hombres no vacunados, brindando protección contra nuevas infecciones virales

Dosis de vacunas antigripal
Dosis de vacunas Leticia Pérez/IcalAgencia ICAL

El virus del papiloma humano (VPH) no solo afecta a las mujeres; los hombres también se benefician de la vacuna contra este virus, según la explicación de la ginecóloga Mercedes Herrero. La frecuencia del VPH como infección de transmisión sexual es alta, estimándose que el 80% de la población sexualmente activa contraerá el virus en algún momento, tanto hombres como mujeres.

La doctora Herrero destaca que, según estudios, la cantidad de hombres portadores del virus es mayor que la de mujeres. Por lo tanto, el VPH no es exclusivo de mujeres, ya que los hombres también pueden adquirir el virus y desarrollar enfermedades asociadas, según la presidenta de la Asociación SEDISATO e impulsora de Salud sexual para todos.

La vacuna contra el VPH ofrece beneficios significativos a los hombres, incluyendo la reducción de condilomas o verrugas genitales y papilomatosis laríngea, así como la disminución de los riesgos de los cánceres mencionados. Desde 2023, la vacuna se incluye en el calendario de vacunación infantil para niños y niñas a partir de los 11-12 años, expandiendo la protección.

A pesar de que la recomendación de vacunación es relativamente reciente para los niños, la Dra. Herrero enfatiza que los hombres no vacunados aún pueden recibir la vacuna, incluso si son mayores o tienen parejas estables. La vacunación protegerá contra nuevos contactos virales, que pueden surgir con la pareja habitual u otras parejas, ya que estos virus pueden reactivarse tiempo después, incluso años más tarde.

Además de la vacunación, existen otras medidas de protección contra el VPH, como mantener una relación mutuamente monógama y el uso del preservativo, que, si bien disminuye el riesgo de contraer el virus, no lo elimina por completo debido al contacto con áreas no cubiertas por el preservativo.