Salud mental

Vivir con ansiedad: estos son los remedios caseros para tratarla de manera natural

Uno de los trastornos más comunes pueden dificultarnos nuestro día a día, pero trabajando en ello, podemos conseguir reducir el estrés y combatir esta patología

Estos trastornos se caracterizan porque la ansiedad no desaparece durante largos periodos de tiempo. Los síntomas pueden interferir con las actividades diarias
Estos trastornos se caracterizan porque la ansiedad no desaparece durante largos periodos de tiempo. Los síntomas pueden interferir con las actividades diariaslarazon

Lidiar con el día a día y enfrentarse a los problemas de la vida puede ser complicado. Nuestra mente actúa a mil revoluciones por minuto desde que somos jóvenes, con los estudios, hasta que llegamos a la vida adulta donde ese agotamiento mental se intensifica. El estrés, nerviosismo, tensión o dolor en el pecho que podemos sentir son síntomas que avecinan la ansiedad, uno de los trastornos mentales más comunes y de los que pocos logran librarse.

Se entiende por ansiedad al miedo, el temor o la inquietud que se puede sentir en algunos momentos. La persona que la padece se siente inquieta, tensa o con pánico, y las emociones negativas que siente le puede impedir realizar tareas cotidianas con normalidad. En los casos más leves, puede tratarse de una reacción normal al estrés que debería de menguar en minutos, pero en otras ocasiones, incide de forma tan grave que lleva a condicionar la vida de quien la sufre. Por ello, actuar a tiempo es una necesidad, puesto que podría derivar en enfermedades mucho más dañinas.

Más allá de lo importante que es ir a terapia para mejorar nuestra salud mental, existen algunos remedios naturales que son generalmente seguros para poder vivir con esta patología.

Remedios caseros y naturales para poder vivir con ansiedad o estrés

En primer lugar, cabe destacar la importancia del ejercicio físico, que ya no solo ayuda a cuidar nuestra salud física, sino que también despeja nuestra mente, quemando la energía negativa de la ansiedad. Otro de los efectos beneficiosos es que mejora nuestro estado de ánimo. Por otro lado, la meditación también ayuda a reducir los pensamientos intrusivos que se acumulan a causa de la ansiedad. Podemos optar por una amplia gama de estilos de meditación que pueden funcionar, desde el mindfulness, la meditación guiada e incluso el yoga. Y así como estos ejemplos, también tenemos los ejercicios de relajación, ideal para calmar nuestro cuerpo y reducir la tensión acumulada en nuestros músculos, contraídos de forma inconsciente como una reacción a la ansiedad.

Por otra parte, encontrar una manera de expresar la ansiedad puede hacer que se sienta más manejable. Por tanto, la escritura puede ser un gran mecanismo. Tener un diario en el que apuntamos nuestros pensamientos o aquello que nos causa daño puede ayudar a las personas a lidiar con esta patología. Otra actividad ideal puede ser pasar tiempo con animales. Perros gatos, pájaros... Está comprobado que oírles, comunicarnos o jugar con ellos puede reducir el estrés.

Las personas ansiosas tienden a hacer una rutina diaria en su mente o proyectar un sinfín de actividades en poco tiempo, lo que, aunque nos ayuda a organizar nuestro día, también incrementa la ansiedad. Por ello, es bueno ser realista y manejar el tiempo, dar prioridad a nuestros proyectos principales y realizar las tareas pensando únicamente en aquello que estamos haciendo, de tal manera que olvidamos el estrés de situaciones futuras.

Por último, debemos tratar de utilizar otros materiales que nos ayuden como puede ser el aceite de canabidiol, tés de hierbas o suplementos de hierbas, con sustancias que pueden ayudar con la ansiedad y con el sueño. También la aromaterapia es una idea maravillosa para lidiar con estas patologías.