Cómo crear un desinfectante casero contra el coronavirus

La rápida propagación del coronavirus ha llevado a que mucha gente busque, sin éxito, mascarillas y otros utensilios que le puedan proteger de la infección. Según la OMS, una de las formas más efectivas para evitar el contagio es lavarse las manos con bastante frecuencia, ya que el virus puede llegar a sobrevivir en cualquier superficie durante cinco días.

Por ello, muchos han sido los que han acudido a farmacias y otros establecimientos para comprar un desinfectante de manos, cuyo precio ha experimentado una notable subida en algunos lugares. Una alternativa a esto podría ser la fabricación de un desinfectante de manos casero, que debería llegar al menos un 60 por ciento de alcohol y es al menos tan efectivo como el agua y jabón.

Para ello, es necesario alcohol isopropilico, gel de aloe vera, una taza, una cuchara, un embudo y una botella de spray o un recipiente de jabón líquido, según informa la cadena norteamericana CBS. El primer paso es llenar dos tercios de la taza con alcohol y el tercio restante completarlo con aloe vera, lo que hará que el desinfectante sea más fácil de aplicar. Después hay que mover bien la mezcla para que todo se integre. En el caso de que se quiera eliminar el olor a alcohol, se pueden añadir unas gotas (5 a 10) de aceite esencial de lavanda. Con ayuda del embudo se puede verter la mezcla en uno o varios recipientes.

En el caso de que no se tenga a mano alcohol, se puede sustituir por vodka. Si se hace de esta manera, hay que llenar el recipiente con un tercio o un cuarto de vodka y el resto completarlo con el aloe vera. Esta receta sugiere agregar de 10 a 15 gotas de aceite esencial de árbol de té y lavanda, que tiene propiedades antibacterianas y que matan fuerte el olor a alcohol del licor.

Pero lavarse las manos no es la única medida de precaución que hay que extremar para evitar el contagio. También se debe evitar tocarse la cara, la boca o la nariz con las manos y evitar el contacto cercano con cualquier persona enferma. Esta última ha sido llevada al extremo en Italia, donde en las zonas más afectadas han prohibido a las personas acercarse a menos de un metro y donde se plantean prohibir hasta darse un beso.