Italia cierra Lombardía y otras 14 provincias por el coronavirus

Italia tomó este sábado la decisión más drástica que podía adoptar. Siguiendo los pasos de China, ordenó cerrar toda la región de Lombardía y 14 provincias más. Sólo en Lombardía, cuya capital es Milán, viven unos 10 millones de personas. Desde que se apruebe el decreto no se podrá entrar ni salir de allí salvo por motivos «graves o estrictamente necesarios».

La disposición estará en vigor hasta el próximo 3 de abril. El resto de provincias afectadas son Módena, Parma, Piacenza, Reggio Emilia, Rímini, Pésaro y Urbino, Venecia, Padua, Treviso, Asti, Vercelli, Novara, Verbano-Cusio-Ossola y Alessandria, todas en el norte del país. Se trata de una disposición límite, que tiene como objetivo contener un virus que ya ha dejado en Italia más de 5.000 contagiados y 233 fallecidos que han dado positivo por coronavirus.

Los efectos de esta decisión serán enormes. Milán, la capital económica del país y su ciudad más dinámica, quedará clausurada durante casi un mes. También distintas regiones del Véneto y Emilia Romaña, que componen la mayor parte de la zona productiva italiana. Además de la prohibición de entrar y salir de estas zonas, el decreto contempla la clausura de gimnasios, piscinas, museos, centros culturales o estaciones de esquí.

Los centros comerciales mantendrán sus puertas cerradas sólo los fines de semana. Y los colegios continuarán cerrados en estas provincias hasta el 3 de abril. En el resto del país, los colegios, institutos y universidades se ordenó el cierre hasta el 15 de marzo, aunque se prevé ampliarlo. Además, para el resto de Italia también se contemplan otras medidas de aislamiento.

No podrán abrir en todo el país salas de baile, discotecas o salas de juego. También se prohibirá la celebración de fiestas o eventos públicos de cualquier tipo. En los bares y restaurantes será obligatoria también la distancia de seguridad de un metro, que hasta ahora se había aplicado a otros recintos cerrados. A los mayores de 65 años también se les ha pedido que eviten salir de casa en la medida de lo posible.

«Estamos pidiendo a la gente que cambie sus pautas de comportamiento», insistió Brusaferro. Italia intenta seguir el ejemplo de China, que está logrando frenar el virus gracias a medidas drásticas. Sin embargo, el aislamiento en todo el país sólo se ha aplicado después de que el número de contagios siguiera avanzando.

La cifra de infectados aumentó en 1.000 personas más, hasta 5.000 pacientes que padecen síntomas. Si bien, por primera vez en tres días el número de fallecidos que han dado positivo por coronavirus bajó el ritmo. La cifra de muertos se elevó en 36 personas más, hasta los 233 fallecidos.

Las nuevas medidas se suman a las que ya se aprobaron en el momento en el que estalló la epidemia, hace ahora dos semanas. Un día después de que diagnosticaran el primer caso de coronavirus en el municipio lombardo de Codogno, al norte del país, el Gobierno decretó un cerrojazo para una decena de pueblos circundantes y la localidad de Vo’ Euganeo, en la región del Véneto, donde se encontró otro foco. Todavía no se puede entrar ni salir de esos pueblos.

El abastecimiento de bienes básicos se hace a través de una especie de corredores sanitarios, que son vigilados por el Ejército para que nadie se salte la prohibición. En los últimos días han sido denunciados una treintena de vecinos que salieron por su cuenta. El decreto contempla penas de hasta tres meses de cárcel.

Esos pueblos funcionaron como una especie de laboratorio. Italia se convierte así en el primer país europeo que sigue el modelo chino, aunque surgen dudas de que se haya acometido demasiado tarde, con el virus ya disparado.