Guardia Civil
Utilizaban un radar-sonar para detectar las patrullas marítimas de la Guardia Civil
Desarticulada una organización que distribuía hachís en Europa
La Guardia Civil y la Agencia Tributaria, en el marco de la operación “Capnella”, han desarticulado una organización delictiva dedicada al tráfico internacional de hachís que operaba en las provincias de Granada y Málaga. Han sido detenidas 13 personas, entre los que se encuentra el cabecilla de la red. Asimismo, han sido realizados cinco registros en las localidades granadinas de Almuñécar y La Herradura y otro en Nerja.
Los agentes se han incautado 900 kilos de hachís y seis embarcaciones; en dos, habían construido dobles fondos para esconder la droga que transportaban. Además, se han intervenido dos armas cortas; 19.375 euros; nueve automóviles (dos de los cuales utilizaban para transportar y botar las embarcaciones intervenidas); dos motocicletas; 40 teléfonos móviles; cuatro walkies talkies; un teléfono vía satélite; cuatro prismáticos profesionales y un radar-sónar.
La investigación se inició en agosto de 2019 después de que se detectara la presencia de una organización delictiva que se dedicaba a introducir en España grandes cantidades de hachís procedentes de Marruecos y que operaba de forma permanente en las provincias de Granada y de Málaga.
Durante la fase de investigación, los agentes constataron que esta red utilizaba embarcaciones de recreo con dobles fondos para transportar la droga. Llegaban hasta las mismas costas de Marruecos para cargar el hachís o recibían el transbordo de la droga en alta mar desde otras embarcaciones de más envergadura, y luego la trasladaban hasta las costas de Granada o de Málaga. Una vez en España, almacenaban la droga hasta que era distribuida por toda Europa.
Esta organización trabajaba no sólo para sí misma, sino que también prestaba el apoyo logístico necesario para que otros grupos delictivos pudieran hacerlo: desde botar las embarcaciones necesarias para el transporte, el almacén para la custodia, personal para los alijos y vehículos para el transporte. Para ello, controlaban la situación dela Guardia Civil y de la Policía en tierra; así como la entrada y salida de las patrulleras de la Guardia Civil o Vigilancia Aduanera por mar.
La fase de explotación comenzó con la intervención de un alijo de 900 kilos de hachís en la playa de Sabinillas. Tras el alijo frustrado fueron detenidas seis personas. A partir de ese momento, los investigadores han identificado a todos los integrantes de esta organización y han descubierto el papel que ocupaba cada uno de ellos dentro del entramado criminal.
✕
Accede a tu cuenta para comentar