Ahora que ya ha terminado el periodo festivo de las Navidades, se empiezan a percibir las consecuecias del incremento de la movilidad y las relaciones sociales en la evolución de la pandemia. Así lo ha admitido el ministro de Sanidad, Salvador Illa, esta mañana en rueda de prensa, tras avisar que “vienen semanas duras”. En efecto, según los últimos datos ofrecidos por Sanidad, la incidencia acumulada en 14 días es de 321 casos por 100.000 habitantes, la ocupación de las UCIS del 24% y la positividad del 13%. Una situación considerada de riesgo alto a nivel nacional, y extremo en algunas comunidades (con incidencias que superan los 700 casos en Extremadura y los 500 en Baleares).

“La evolución es a peor en nuestro país, vamos a tener semanas duras”, ha dicho Illa, si bien, descarta tomar medidas adicionales más allá del Plan de actuaciones de respuesta coordinada que aprobó el ministerio de Sanidad el 22 de octubre y que permitió suavizar la segunda oleada. Comunidades como Cataluña y Castilla y León ya han comunidado nuevas restricciones y hoy por la tarde se espera que lo hagan más comunidades. Pero, al menos de momento, Sanidad no tomará cartas en el asunto más allá de las directrices que aparecen en el Plan de respuesta coordinada. Por tanto, no decretará un nuevo confinamiento domiciliario. “Es verdad que las comunidades ya están tomando medidas de acuerdo con la estrategia que nos permitió vencer a la segunda oleda”, que está basada en tres pilares: indicadores para evaluar el nivel de riesgo, actuaciones de respuesta proporcionada a cada nivel, y evaluación del resultado de las medidas a los 14 días de haberlas puesto en marcha. “Esta estrategia nos va a permitir parar este nuevo incremento de casos. Ya sabemos qué hacer: reducir la movilidad y limitar al máximo los contactos” , ha reiterado Illa en la comparecencia posterior a la reunión de seguimiento de la pandemia que ha presidido Pedro Sánchez.

460.000 dosis semanales

En este encuentro también se ha tratado el plan de vacunación. El objetivo, según ha dicho el ministro, es “tener más personas vacunadas que personas contagiadas”, así como llegar a una inmunización del 70% en verano. No obstante, el ritmo de vacunación todavía es muy lento en algunas regiones. “Se está cogiendo ya una velocidad aceptable, pero hay que mejorar”, ha admitido. Hasta el momento se ha vacunado a 140.000 personas, pero desde el Gobierno esperan incrementar pronto ese número con las vacunas de Moderna, aprobadas ayer la Agencia Europea del Medicamento. La UE ha adquirido 600.000 dosis y, según Illa, a España llegará la parte proporcional a su población. Además, la Comisión Europea ha anunciado la compra de otros 300 millones de dosis de la de Pfizer, pero todavía se desconoce cuántas se distribuirán a España, si bien Illa ha apuntado que nos correspondería en torno a un 10%.

Actualmente, con las dosis semanales de Pfizer (350.000) y las de Moderna (160.000), España contará con 460.000 vacunas semanales, insuficientes para lograresa inmunización colectiva del 70% que pretende el Gobierno en verano. A este respecto, el ministro ha llamado a la calma asegurando que la estrategia de vacunación europea cuenta con un portfolio de siete vacunas, dos de ellas ya aprobadas (Pfizer y Moderna) otras dos en evaluación (Oxford y Janssen) y otras todavía en proceso de revisión (Curevac, Novavax y Sanofi). “Si se cumplen todos los plazos, se irán adquiriendo más dosis, también a medida que se vayan autorizando las nuevas vacunas, para lograr ese objetivo de 70% de vacunados en verano”.