De 3 a 31 euros
¿Por qué la vacuna de Moderna es mucho más cara que la de Pfizer o AstraZeneca?
Los costes de fabricación y distribución afectan al precio, pero las patentes son las que juegan un papel determinante
Actualmente hay tres vacunas contra el coronavirus aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento (EMA) que se están distribuyendo en España, la de Pfizer y BioNTech (52 millones de dosis), la de Moderna (16 millones de dosis) y la de AstraZeneca y la Universidad de Oxford (31 millones de dosis).
Las tres comparten un único propósito, inmunizar a la población, pero son diferentes. Las de Pfizer y Moderna utilizan la misma ténica de fabricación, el ARN mensajero (o ARNm), mientras que la de AstraZeneca se basa en un adenovirus, como la rusa Sputnik-V o la de Janssen y Johnson&Johnson. La forma de conservación también es distinta: las dos primeras deben almacenarse a temperaturas bajo cero y la tercera aguanta sin problemas en un refrigerador normal, entre 2 y 8 ºC.
Sin embargo, otra diferencia notable es el precio. La más cara es la de Moderna, con 31 euros por dosis (hacen falta dos para completar la vacunación), casi el doble que la de Pfizer, que cuesta 17 euros por dosis. Muy lejos se encuentra la de AstraZeneca, con un precio de 3 euros por dosis. ¿A qué se debe esta disparidad si las tres cumplen el mismo objetivo?
¿Qué factores influyen en el precio de las vacunas?
El trabajo de todo un año de investigación, ensayos y materiales tiene una serie de costes que se reflejan en el precio de las vacunas. Si solo se tienen en cuenta estos factores, todas las vacunas tendrían un precio similar, por lo que hay que sumar otra serie de costes particulares de cada fármaco.
Lo primero son las condiciones logísticas. Pfizer es la que presenta más problemas por su almacenaje entre -60 y -80 ºC, seguida de Moderna, que debe permanecer a -20 ºC, pero aguanta 30 días en la nevera. La de AstraZeneca es la más fácil de transportar, ya que se conserva a una temperatura de entre 2 y 8 ºC. También se tiene en cuenta la eficacia del medicamento. La de Pfizer y BioNTech es la más potente, con una eficacia del 95%. La de Moderna se queda en el 94,5% y la de AstaZeneca en el 82,4%. Además, esta última es más barata porque utiliza una tecnología (ARNm) que necesita menos infraestructuras para la producción.
Ahora bien, un factor determinante es la distribución. La de Moderna es más cara, en parte, porque la mayoría de la producción se realiza en Estados Unidos y los costes de distribución son más elevados. Sin embargo, se intuye que lo que más afecta en el precio son las patentes. Esta exclusividad de los fabricantes ralentiza el ritmo de producción y encarece el precio de las dosis.
✕
Accede a tu cuenta para comentar