Investigación
Un paciente ingresa en Urgencias con una PCR positiva bajo el brazo y, en menos de tres horas, el equipo médico que lo recibe sabe con una altísima precisión cuáles son sus probabilidades de morir. Esta situación, que parece de ciencia ficción, es ya una realidad gracias a una calculadora virtual diseñada y validada por un equipo de inmunólogos del madrileño Hospital 12 de Octubre. Gracias a cuatro parámetros (tres de laboratorio más la saturación de oxígeno en sangre) cuyos valores se obtienen de un análisis de sangre y a los que se añade la edad del enfermo, los médicos disponen de un muy precoz pronóstico que les va a ayudar a la hora de decidir qué hacer con esa persona contagiada.
Uno de los investigadores que ha tomado parte en su desarrollo, Alberto Utrero (Badajoz, 1993), explica a LA RAZÓN que el objetivo del invento es, precisamente, ahorrar tiempo a los sanitarios: «Se trata de usar los valores que ya se extraen en la analítica para que la decisión sobre el tratamiento adecuado se acelere». Según salga el porcentaje se mandará al paciente a casa, a planta o se le ingresará directamente en la UCI.
Utrero asegura que «el 44 por ciento de los pacientes que detectamos que son de alto riesgo acaba falleciendo». El «punto de corte» que establece esta herramienta, llamada COR+12, es tan certero que a los que quedan por debajo de ese baremo «les va muy bien en prácticamente todos los casos».
La muestra para certificar que se trata de un instrumento sólido y fiable incluyó, en una primera ola, 600 pacientes solo en el 12 de Octubre. Pero en la segunda fase de este sistema de predicción de la mortalidad se contó con la colaboración de otros centros hospitalarios de la capital española. En total, 1.477 casos de personas ingresadas en la Fundación Jiménez Díaz, el Ramón y Cajal y el Hospital Infanta Elena: «Quisimos ir un pasito más allá y contar con otros centros para evitar el sesgo que suele asociarse al hecho de realizar el estudio en un solo hospital».
En este momento, todos los profesionales que lo deseen pueden acceder al COR+12 a través de un enlace abierto (https://utrero-rico.shinyapps.io/COR12_Score/). En realidad, cualquier persona puede hacerlo, aunque no está pensado para el público general. Tampoco «lo planteamos como una Biblia, solo se trata de proporcionar información extra que ayude en la toma de decisiones», explica Alberto Utrero. No se espera que el sanitario comparta con el enfermo de coronavirus el porcentaje de mortalidad al que se enfrenta. Hay que tener en cuenta que es una herramienta experimental y, como cualquiera de este tipo, hará falta un tiempo hasta que obtenga un rigor que se pueda calificar como «científico».
Dado que uno de los principales problemas de la pandemia de la covid-19 en nuestro país ha sido la amenaza constante de colapso de nuestro sistema sanitario, iniciativas como la de Alberto Utrero y la inmunóloga Rocío Laguna ofrecen una manera de detectar precozmente los casos más graves, que pueden tener peor pronóstico y que, por tanto, han de ser priorizados en momentos de alta ocupación de camas, la peor pesadilla para nuestros sanitarios.