Tribunales

Primer respaldo judicial a las restricciones sin estado de alarma: aval al toque de queda en Baleares

El Tribunal Superior autoriza, con dos votos en contra, las medidas sanitarias impulsadas por el Gobierno de Francina Armengol en las islas

Varias personas caminan por el centro de Palma de Mallorca
Varias personas caminan por el centro de Palma de MallorcaCATI CLADERAEFE

Primer aval judicial a las restricciones tras el fin del estado de alarma. ElTribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB)ha autorizado, con tres votos a favor y dos en contra, las medidas sanitarias impulsadas por el Ejecutivo de Francina Armengol, entre ellas el toque de queda, a partir del próximo domingo.

Aunque según fuentes del tribunal la resolución y los argumentos se conocerán en los próximos días, la decisión de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJ balear -que había reclamado al Ejecutivo de las islas esas medidas sanitarias para pronunciarse al respecto sobre la limitación de derechos fundamentales que implica- supone por ahora su ratificación a expensas de lo que pueda decidir al respecto el Tribunal Supremo si la Fiscalía decide recurrir en casación.

Además del toque de queda entre las once de la noche y las seis de la mañana, el tribunal ha ratificado el resto de restricciones que el Gobierno balear prolongará desde el mismo momento en que expire el estado de alarma y hasta el próximo día 23. Entre ellas, los controles para entrar en la comunidad autónoma y la limitación a seis personas de las reuniones tanto en el interior como en el exterior de espacios públicos y privados. Asimismo, las medidas aprobadas por el Ejecutivo de Armengol imponen limitaciones de aforo en los lugares de culto del 50% (siempre con al menos un metro y medio de distancia entre personas no convivientes).

Test, PCR o cuarentena para los viajeros

Estas medidas fueron remitidas por el Govern balear tras un consejo extraordinario que aprobó ayer precisamente mantener diversas medidas para contener la expansión del coronavirus, que hasta ahora están amparadas por el estado de alarma decretado por el Gobierno, que decaerá a partir de las 00.00 horas del próximo domingo.

El respaldo judicial a las restricciones supone, por ejemplo, que las personas de otras comunidades autónomas que quieran entrar en las islas tendrán que dar cuenta del motivo del desplazamiento y, en su caso, someterse a un control sanitario. Además, si han estado fuera de Baleares más de 72 horas están obligadas a presentar una Prueba Diagnóstica de Infección Activa (PDIA) por SARS-CoV-2 con resultado negativo o someterse a un test de antígenos a la llegada a Baleares, hacerse una PCR en las siguientes 48 horas o mantener una cuarentena de diez días.

Si se trata de residentes o de personas que viajan con causa justificada, será la comunidad autónoma la que pague esas pruebas, que sin embargo tendrán que abonar los propios pasajeros que no se desplacen por causas justificadas.

En cuanto a las reuniones en espacios interiores, el acuerdo del Gobierno balear establece que deben ser como máximo de dos núcleos de convivencia (siempre con el tope de seis personas). Fuera de esta limitación se encuentran, no obstante, las reuniones de tipo laboral o institucional, así como las actividades deportivas o culturales, entre otras.