Volcán La Palma

¿Qué pasa si un avión atraviesa una nube de cenizas volcánicas?

Las cenizas volcánicas son abrasivas. Estos son los daños que puede provocar en las aeronaves

La columna de humo que sale del volcán de La Palma, vista desde el Roque de los Muchachos
La columna de humo que sale del volcán de La Palma, vista desde el Roque de los MuchachosEuropa PressEuropa Press

El volcán de Cumbre Vieja de La Palma, no da tregua. Después de que el pasado sábado se colapsara la cara norte del cono volcánico, se ha incrementado la actividad efusiva y eruptiva obligando al desalojo de otras ochocientas personas en Los Llanos de Aridane por el avance de la nueva colada. La cifra total de evacuados supera ya los 6.700. Los últimos datos vía satélite señalan que la lava ocupa ya 656 hectáreas y ha afectado a su paso a 1.541 construcciones, de las cuales 1.458 están destruidas.

Mientras tanto, los aeropuertos de las islas Canarias siguen operativos, aunque las compañías aéreas están cancelando operaciones con destino a La Palma. De momento, hay tres vuelos cancelados -en total seis operaciones de llegada y salida -con Madrid y Alemania. Concretamente, se trata de un vuelo de Iberia procedente de Madrid, uno de Condor, con salida en Munich y escala en Frankfurt, y otro de Easyjet que debía partir a primera hora de la tarde desde Berlín.

Según apuntan los controladores aéreos, la nube de cenizas y dióxido de azufre que afecta a la isla canaria se desplaza al sur y este de la isla y por ahora, este miércoles la navegación aérea no está afectada. La altura de emisión de ceniza alcanza los 3.500 metros y se trasladan desde el oeste girando al este y sur, añaden en el informe.

Desde que comenzó la erupción, muchos usuarios del transporte aéreo se han visto afectados por retrasos o cancelacionescomo consecuencia de la evolución de la nube de cenizas volcánicas o sus efectos sobre algunos aeropuertos canarios. El Colegio Oficial de Pilotos de la Aviación Comercial (Copac) recuerda que la prioridad de las tripulaciones es “evitar riesgos y garantizar la seguridad de las operaciones aéreas y de los pasajeros”.

Señala que las partículas que emite el volcán son abrasivas, “por lo que pueden dañar gravemente partes críticas del avión- especialmente los motores-, bloquear sondas que ofrecen a la tripulación información de parámetros clave para el vuelo o afectar a las antenas de comunicaciones de la aeronave, entre otras consecuencias”.

Dado que no existen sistemas de detección, “sobrevolar una zona con presencia de cenizas volcánicas puede suponer un riesgo para la seguridad”, por lo que los pilotos siempre “evitarán entrar en la zona afectada por las emisiones del volcán”.

Los pilotos, como máximos responsables de la seguridad de las operaciones, realizan una planificación minuciosa de cada vuelo. Por ello aseguran que para las tripulaciones que han de sobrevolar actualmente el espacio aéreo de Canarias es fundamental “disponer de la información más actualizada y precisa posible para conocer en cada momento la altitud de la nube de ceniza y la dirección del viento para no entrar en una zona de cenizas ni verse afectada por sus partículas”.

No obstante, si algún piloto detecta presencia de ceniza en su trayectoria, lo notificará inmediatamente a los servicios de control de tránsito aéreo para tomar medidas preventivas con otras aeronaves. Además, se realizará una revisión exhaustiva de la aeronave una vez en tierra para comprobar que no hay ningún daño.

Por último, el COPAC recuerda que además de seguir los procedimientos establecidos y las recomendaciones que emitan las autoridades aeronáuticas en cada momento respecto a la erupción del Cumbre Vieja, las tripulaciones han de recibir “un entrenamiento específico para este tipo de escenarios operacionales, tal y como establece la normativa aeronáutica europea, para gestionar adecuadamente cualquier incidencia relacionada con cenizas volcánicas”.