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Así avanzan las coladas de lava del volcán de La Palma
Las autoridades de la isla han decretado desde el martes tres nuevas evacuaciones preventivas, la última ha afectado a unos 300 vecinos
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El volcán de Cumbre Vieja en La Palma sigue rugiendo 26 días después del inicio de su erupción, con una sismicidad que ha ido en aumento en las últimas horas, con un terremoto de 4,5 grados en Villa de Mazo, el de mayor magnitud de los sentidos hasta ahora.
El plan especial de Emergencias Volcánicas de Canarias (PEVOLCA) ha ordenado este jueves una nueva evacuación por la previsión de avance de la colada de lava del volcán que discurre más al noroeste y que afecta a entre 250 y 300 vecinos.
Se trata de la zona comprendida en la LP-215 (carretera de La Laguna a Tazacorte), desde el límite con el municipio de Tazacorte señalado en la carretera hasta el cruce con la LP-213 (carretera a Puerto Naos). Esta zona linda con el límite del perímetro ya evacuado.
La lava del volcán de La Palma ocupa 680 hectáreas, 24 más que en el recuento anterior, y ha afectado a su paso a 1.634 construcciones, de las cuales 1.548 están destruidas, según la última medición del sistema de satélites europeo Copernicus.
Los kilómetros de carreteras afectadas por la erupción, que comenzó el 19 de septiembre, son 53,2, y de ellos 50,1 kilómetros están destruidos. Esta es la vigésima actualización de los mapas por satélite de Copernicus y corresponde a la situación del 13 de octubre a las 19.29 horas UTC.
De acuerdo con los indicadores que monitorizan los científicos en el volcán, sobre todo las emisiones de dióxido de azufre, todo hace pensar que el final de la erupción no se va a producir ni a corto ni a medio plazo.
El volcán está lanzando un penacho de gases a 3.000 metros de altura con cantidades elevadas de dióxido de azufre, 17.774 toneladas diarias, y esa medida tendría que bajar hasta 100 para pensar que la erupción toca a su fin.
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