Otras 500 personas más evacuadas por el avance de la lava

La lava devora todo lo que se encuentra a su paso y así, la colada que durante toda la noche avanzó sobre el barrio de La Laguna ha destruido la vertiente sur del mismo, tomando como referencia la carretera que lo une con el municipio de Tazacorte. El colegio, la gasolinera, la sociedad, todo es ya un recuerdo. La colada avanza paralela a la carretera con dirección a la Montaña de La Laguna.

Los científicos estiman que el terreno llevará esa colada hacia el sur, encontrándose de frente con la Montaña, donde seguirá acumulándose material. Desde este punto se abren múltiples posibilidades, siendo la que menos daño causaría el que se uniera con la colada que ya circula por el sur de la Montaña. «Si la colada de La Laguna rodea la Montaña por el norte sería un escenario poco deseable». Esta frase es del director del Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende. Y parece que puede ser así por el movimiento que se anunció la última noche: el Pevolca ha ordenado la evacuación preventiva de más barrios, esta vez los situados al sur del casco urbano de Tazacorte, que corresponde a Marina, La Condesa, Campo de Fútbol, además del barrio de Las Martelas, del municipio de Los Llanos de Aridane.

Según confirma el alcalde de Tazacorte, Juan Miguel Rodríguez, serían evacuadas de inmediato más de 500 personas que viven en estos barrios rodeados entre plataneras en la zona anexa al comienzo del casco urbano.

Varios vecinos se han encontrado con la sorpresa de este anuncio y han tenido que desalojar durante la noche sus hogares. Otros en cambio «ya se lo veían venir», apunta uno de los evacuados y aseguran que desde hace días no dejan de seguirle la pista incesantemente a las lenguas de lava. Muchos de los evacuados desean y «rezan» para que estos desalojos preventivos queden en una simple medida de seguridad y la colada tome otra dirección que no sea la destructiva. Pero nadie aún puede afirmar con certeza qué rumbo tomará la lava y cuál es el destino de los hogares de estas nuevas 500 personas desalojadas.

Los expertos apuntan que la calidad del aire continúa siendo buena en la mayor parte de la isla, aunque existen partículas en suspensión en los lugares más cercanos a la erupción. En este tipo de atmósferas, el uso de mascarillas FFP2 es recomendable y obligatorio en personas con el sistema inmunitario débil.

De las personas evacuadas, 416 se encuentran ahora mismo en alojamientos turísticos, 375 se encuentran en el hotel de Fuencaliente y 41 en el hotel Valle de Aridane. El Catastro informa de 1.196 edificaciones afectadas: 963 son de uso residencial, 124 de uso agrícola, 57 de uso industrial, 27 son construcciones de ocio y 24 de uso público u otros. Las coladas ocupan una superficie de 825, 23 hectáreas, 17,38 hectáreas más que el día anterior. La anchura máxima entre coladas sigue manteniéndose en 2,9 kilómetros.

La erupción ha provocado que grandes penachos de dióxido de azufre se hayan desplazado por el norte de África, Europa y el Atlántico hasta el Caribe, según se desprende de la monitorización de los científicos del Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de Copernicus. La monitorización realizada sobre la evolución de la columna total de dióxido de azufre (SO2) se basan en observaciones satelitales de las columnas totales de SO2. Los penachos recorrieron principalmente el norte de África y los países del sur de Europa, entre ellos España y Portugal, y posteriormente alcanzaron el norte y el oeste de Europa.

Sin embargo, la dirección del viento cambió a principios de octubre y el CAMS rastreó los penachos de SO2 que recorrieron una distancia aproximada de 5.000 kilómetros hasta llegar al Caribe.