Sociedad

¿Está de acuerdo con que se prohíba fumar en coches, terrazas y playas?

Esta posibilidad que contempla el Plan contra el Tabaquismo que prepara Sanidad ha levantado una fuerte controversia

Imagen de una mujer fumando en una terraza de un bar en Madrid.
Imagen de una mujer fumando en una terraza de un bar en Madrid.Jesús G. FeriaLa Razon

El Ministerio de Sanidad ultimado el Plan Integral contra el Tabaquismo que introduce, entre otras cuestiones, la prohibición de fumar en vehículos particulares, el empaquetado genérico de las marcas de tabaco y busca equiparar por ley las restricciones a los cigarrillos electrónicos.

Precisamente la prohibición de fumar en vehículos particulares ha provocado un agitado debate en la sociedad entre partidarios y contrarios a esta posibilidad. Los primeros, porque creen que puede suponer un riesgo para la conducción y un peligro para el resto de conductores, y los segundos porque consideran que se trata de un ámbito privado en el que el Gobierno no se debería meter.

En sus 119 páginas, el ministerio que dirige Carolina Darias recuerda que ambiciona lograr una “generación libre de tabaco” en España. Para ello y “antes del año 2023″ se propondrá incrementar los espacios libres de humo -lo que incluye también cigarrillos electrónicos y productos de tabaco calentado-, “especialmente en los espacios exteriores”, una referencia implícita a las terrazas de bares y restaurantes y a las proximidades de los edificios públicos, señalan fuentes sanitarias.

También a corto plazo y “a implementar en dos años”, el Ministerio de Sanidad quiere modificar la ley 28/2005 y el real decreto 579/2017, adaptando así toda la normativa contra el tabaquismo “a los cambios producidos en el mercado con la aparición de nuevos productos y logrando un avance en la regulación de los espacios sin humo”.

Estos espacios sin humo y “sin aerosoles de cigarrillos electrónicos” contemplan también “ciertos espacios del ámbito privado”, como los “vehículos particulares”.

El objetivo último es que con todo esto se logre una reducción de un tercio de la mortalidad prematura por enfermedades no transimisibles en 2030 y seguir la recomendación europea de bajar las tasa de fumadores diarios un 5% para 2040, dos puntos más entre los jóvenes de 14 a 18 años.