Los nombres de bocadillos más raros de España

España es un país cuya tradición culinaria es reconocida por gran parte del planeta. Gran parte del territorio cuenta, así, con grandes ejemplos gastronómicos capaces de hacer las delicias de muchos. Además, en los últimos años la cocina española ha adquirido un nivel único en el mundo con grandes exponentes por todo el país.

Ferran Adrià, David Muñoz o Martín Berasategui son tres de los múltiples ejemplos de grandes cocineros que representan a España. Aun así, no solamente la buena gastronomía española se encuentra en los grandes restantes. En todo el país la comida tradicional goza de una salud y fama sin igual en otros enclaves del mundo.

Gracias a ello millones de visitantes vienen cada año disfrutan de la gastronomía española que cuenta con miles de platos para degustar. Además, la cocina tradicional del país tiene todo tipo de platos saludables que han ido perdurando en el tiempo con el paso entre generaciones.

Incluso, el aporte de los alimentos mediterráneos suponen todo un punto clave para los beneficios de la dieta española. Gracias a ellos muchos platos son envidiados alrededor del mundo consiguiendo que aquellos que los degustan traten de replicarlos o acudir en más de una ocasión al país.

Entre todos los platos hay uno que, pese a contar con representación en muchos países, destaca por encima del resto siendo muy tradicional, el bocadillo. Salvavidas para muchos en el desayuno o cena este plato se encuentra disponible en la mayoría de hogares españoles aunque según donde nos encontremos de España puede tener una serie de características únicas.

En Cataluña, por ejemplo, se unta tomate en el pan directamente para dotarlo de un sabor único aunque esta medida ya se ha extendido con el paso de los años. Pese a que la tradición encierra emparedar un alimento, muchas veces embutido, en dos todos de pan existen otros muchos ejemplos. Algunos, incluso, cuentan con unos nombres muy raros que a continuación repasamos.

Bocadillos con nombres raros

El primero de la lista es el popular “bikini” en Cataluña. El conocido como mixto en el resto de España cuenta con una peculiar denominación que causa divertidas confusiones cuando se viaja fuera de la comunidad deseando pedir el famoso bocadillo con queso y jamón york.

Otro de los lugares con nombres graciosos para denominar un bocadillo es Cádiz. Sus habitantes nombran esta preparación de carne mechada y una rodaja de tomate como “reverencia” pero sin inclinarse al pedirla.

El “matrimonio” es otro de los bocadillos con denominación extraña en el país. Esparcido por toda España, así, esta preparación a base de pescado suele contar con boquerones en vinagre aliñados con ajo y perejil junto a anchoas siendo toda una estrella de muchos bares.