Perros

Elegir la protección en el coche en función del peso del animal

En un accidente a 50 km/h, un perro de 20 kilos de peso pasaría a impactar contra los pasajeros como si su peso real fuese de 700 kg

Perros en coche
Perros en cocheJesús G. FeriaLa Razón

Hay que tener en cuenta que no es lo mismo desplazarse en el coche con un perro de 5 kg que con uno de 12 kg. Sus necesidades y medidas de protección no son las mismas. Y es que, según Norauto, en caso de frenazo brusco o accidente, un perro mal sujeto puede salir proyectado del habitáculo multiplicando su peso según la velocidad. Por ejemplo, en un accidente a 50 km/h, un perro de 20 kilos de peso pasaría a impactar contra los pasajeros como si su peso real fuese de 700 kg. Si la mascota no va bien sujeta, este impacto puede ocasionar a los ocupantes graves secuelas, además de las terribles lesiones que tendría la mascota.

A esto hay que sumar que se trata de algo obligatorio. El Reglamento de Circulación recoge que el conductor debe cuidar especialmente de mantener la posición adecuada y que la mantenga el resto de los pasajeros, y la adecuada colocación de los objetos o animales transportados para que no haya interferencia entre el conductor y cualquiera de ellos. Por ello, nunca deben viajar sueltos o en brazos.

Así, para los perros pequeños y medianos hay que utilizar un arnés con cinturón que se engancha al cinturón de seguridad del vehículo. Se recomienda que sea de dos enganches para evitar su posible rotura en caso de frenazo brusco o colisión. Aunque el transportín es la opción más segura es colocarlo en el suelo del vehículo, ya que encaja muy bien entre ambos asientos.

Para los perros grandes, se debe utilizar transportín de mayor tamaño que se coloca en el maletero en posición transversal a la dirección de la marcha. Si no hay una separación física entre el maletero y los ocupantes, se debe complementar el transportín con una rejilla divisoria.