¿Por qué las matrículas no incluyen vocales?

Todos los vehículos que circulen por las carreteras españolas están obligados a incorporar una matrícula. Y la mayoría de ellos, en torno a 35 millones, llevan una matrícula ordinaria. En la actualidad, esta placa se compone por cuatro dígitos y tres letras consonantes. Además, la matrícula incluye también la banda azul europea en la parte lateral izquierda. Aunque -eso sí- aún quedan en circulación algunos vehículos con matrículas del sistema anterior (“X-0000-AB”).

Esta disposición de caracteres alfabéticos y numéricos se agotó en determinadas provincias en el año 2000. Y fue entonces cuando hubo que recurrir a un nuevo sistema, creándose así el modelo actual, con tres letras al final y eliminando la letra que señalaba la provincia de origen del automóvil. Desde entonces, las matrículas ordinarias de los vehículos que forman el parque móvil español siguen el esquema “0000-BBB”.

Las primeras matrículas que obedecen a este formato se pusieron en circulación el mes de septiembre de ese mismo año. Y lo hicieron con una secuencia iniciada con la letra B. Es decir, que cualquier vehículo que se matriculase a partir de aquel momento se identificaría con las letras BBB a BZZ. Este código se agotó en el mes de octubre del año 2002. Y después se continuó con la letra C... hasta el mes de septiembre de 2004, cuando se comenzó a matricularse a los coches con la letra D.

Desde el mes de septiembre de 2019, los coches de nueva matriculación se identifican con el código iniciado por la letra L. Sin embargo, ya quedan muy pocas plazas. Y por eso, se estima que -al ritmo normal de matriculaciones- a partir del próximo mes de septiembre,todos los coches que salgan del concesionario, lo harán con la letra M.

¿Por qué no se incluyen vocales?

La reforma de las matrículas del año 2000 se hizo conjuntamente con el resto de países de la Unión Europea. De forma que el diseño de las matrículas de todos los países miembros fuera el mismo. Ese es el motivo por el que no vamos a encontrar ningún coche que incluya en la matrícula la letra Ñ, que es una letra que se utiliza únicamente en los países de herencia hispánica.

Aunque la letra Ñ no es la única excepción. En realidad, hay otras 6 letras del abecedario que no están incluidas en el sistema de matriculación: las cinco vocales y la Q. Asimismo, combinaciones como la QU o la LL tampoco se contempla, a pesar de que hay personas que las incluyen en sus abecedarios.

El motivo para hacer una excepción con las vocales era evitar que se formasen combinaciones malsonantes como ‘PIS’, ‘ANO’, etc. O que se acrónimos que pudieran generar confusión como ‘ONG’ o ‘PCE’ o nombres propios como ‘EVA’, ‘ANE’, ‘ANA’. También quedó excluida la letra Q porque podría crear confusiones con la letra O. Y es que, si queremos que un sistema de matriculación sea útil, debe permitir que un vehículo pueda identificarse de inmediato... sin que quede ningún atisbo de duda.