Pandemia

Los cuatro máximos responsables de los contratos covid, apartados de la escena sanitaria

La marcha de la directora general de Farmacia se suma a la del director del Ingesa, el secretario general y el ministro Illa

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, y el anterior titular de ese departamento, Salvador Illa, durante el acto de traspaso de la cartera del Ministerio de Sanidad, el 27 de enero de 2021.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, y el anterior titular de ese departamento, Salvador Illa, durante el acto de traspaso de la cartera del Ministerio de Sanidad, el 27 de enero de 2021.EUROPA PRESS/J. Hellín. POOLEuropa Press

El Ministerio de Sanidad ya no cuenta entre sus filas con ninguno de los cuatro máximos responsables de las compras fallidas de material contra la Covid-19 durante la primera ola de la pandemia, entre febrero y junio de 2020. La semana pasada dejó su puesto la directora general de Cartera Común del Sistema Nacional de Salud (SNS) y de Farmacia, Patricia Lacruz, tras un mandato convulso en el que, además de protagonizar uno de los mayores escándalos de toda esta crisis de salud pública, la compra de test defectuosos a una empresa china que hubo que devolver, se granjeó la enemistad de prácticamente toda la industria farmacéutica y de la farmacia comunitaria. Los laboratorios culpan a Lacruz de poner trabas desde hace años en el acceso de los nuevos medicamentos al mercado. Su llegada a España se produce 517 días de media después de su aprobación en Europa. Un mundo para los enfermos. Los segundos se sienten ninguneados por el Ministerio de Sanidad.

La salida de este alto cargo, vendida por el departamento que dirige Carolina Darias como una “dimisión” decidida “por motivos personales”, se suma a la de los otros tres máximos responsables de las compras en ese periodo convulso en el que mascarillas, guantes, batas y otros equipos de protección contra el coronavirus llegaban tarde, lo que llevó a las autonomías a tener que lanzarse por su cuenta a los mercados internacionales para intentar proteger a su población y a los sanitarios. El anterior alto cargo que abandonó la nave del Ministerio fue un histórico sanitario socialista presente en con todos los ministros de Sanidad de los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez: Alfonso Jiménez Palacios.

Tanto él como Patricia Lacruz están siendo investigados por la Justicia al hilo de una querella interpuesta por Vox y el pasado mes de abril comparecieron ante el Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid para dar cuenta de su actuación. Su titular, Concepción Jerez, indaga en concreto doce contratos firmados por el Ministerio comandado entonces por el catalán Salvador Illa, el máximo responsable de las compras, entre marzo y abril de 2020, y ha incluido en sus pesquisas a Paloma Rosado, un alto cargo del Ministerio de Hacienda.

Jiménez Palacios dirigía entonces el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), un organismo adscrito a Sanidad envuelto en la polémica por realizar numerosas adjudicaciones sin concurso bajo la justificación de “urgente” necesidad; otorgar contratos a empresas sin dirección conocida -un error que el Gobierno tuvo que subsanar sobre la marcha tras estallar el escándalo-; pagos injustificados de sobreprecios muy por encima del valor de mercado, y compras a empresas desconocidas en el sector sanitario o con objetos sociales totalmente ajenos a los materiales sanitarios.

Sanidad, por ejemplo, llegó a apalabrar la adquisición de 200 respiradores a una empresa de 3.000 euros de capital social por un importe unitario de 49.610 euros cuando su valor de mercado apenas superaba los 6.400 euros. La salida del Ministerio de Alfonso Jiménez Palacios se atribuyó a su jubilación. Durante su comparecencia, aseguró ante el juez que el ministro Salvador Illa estaba al tanto de las contrataciones. “Tenía contacto directo con el ministro Illa dos veces al día y le mantenía puntualmente informado de toda la contratación”, declaró, según la vicesecretaria jurídica de Vox, Marta Castro.

El tercer alto cargo que abandonó Sanidad fue Faustino Blanco, ex consejero de Sanidad de Asturias y secretario general de Sanidad con Illa -su número dos- cuando estalló la pandemia. Blanco, que nunca compareció ante el Congreso ni ante los medios, recaló como en la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria del Principado de Asturias, cargo que abandonó al poco tiempo tras trascender que su salario duplicaba el de su antecesor en el cargo. Él y Salvador Illa, el cuarto alto cargo en discordia, eran los máximos responsables de Sanidad cuando Lacruz y Jiménez Palacios acometían las compras. Illa salió de Sanidad en enero de 2021 para encabezar la lista del Partido Socialista Catalán a las elecciones catalanas. Hasta la fecha, el Gobierno no ha promovido ninguna auditoría de su gestión en los primeros meses de la pandemia.