Covid-19

Bloquear las proteinas que usa el SARS-CoV-2 para acceder al organismo, una estrategia útil para todas las variantes

Los científicos están explorando tratamientos que seguirían siendo efectivos independientemente de cómo evolucione el virus

Entrada del coronavirus a nuestras células
Entrada del coronavirus a nuestras célulasAntonio Cruz

A las puertas del invierno, y con una nueva ola asomando en Estados Unidos y en Europa, los científicos siguen explorando nuevas formas de acabar con el virus que causa la covid. Una de ellas es la de bloquear las proteinas por las que el virus accede a nuestro organismo y que, de algun modo, usa en nuestra contra.

En un artículo publicado hoy por Mark Johnson (periodista ganador de un premio Pulitzer en 2011) en el diario estadounidense The Washington Post, se exponen las ventajas de esta estrategia, que, si funciona, podría paliar algunas de las principales deficiencias de los tratamientos y vacunas actuales, incluida su incapacidad para prevenir infecciones y mantener la eficacia frente a un virus cambiante. El enfoque también podría proteger a las personas con sistemas inmunológicos demasiado débiles para tolerar las vacunas.

El SARS-CoV 2 depende de nuestras proteínas para replicarse y realizar otras funciones. Por ello, bloquear su acceso a una proteína crucial- el receptor ACE-2- sería cortarle el paso al organismo en un estadio muy inicial de su replicación. Además, dado que algunas proteínas humanas son “secuestradas” por múltiples virus, un solo tratamiento podría usarse para combatir un amplio espectro de enfermedades.

Un estudio coliderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) mostro, a principios de este año, cómo actúa el fármaco aplidin (plitidepsina) para inhibir la replicación del coronavirus SARS-CoV-2 dentro de las células humanas: el fármaco impide la formación de compartimentos celulares donde se replica el material del virus. De este modo, interfiere en las células y evita la progresión de la infección viral. Su funcionamiento refuerza su potencial para combatir futuras variantes del SARS-CoV-2, pues este paso de la replicación del virus es común a todas las variantes del virus.

En el artículo de Johnson, se citan otros dos estudios aparecidos en el último mes que respaldan la promesa de apuntar a las proteínas humanas en el tratamiento de la covid: uno publicado el martes en la revista Science Signaling , el otro, que aún no ha sido revisado por pares, publicado en el sitio web científico bioRxiv .

Necesidad de nuevos tratamientos

Al principio de la pandemia, Nevan J. Krogan, autor del estudio publicado en bioRxiv y director del Instituto de Biociencias Cuantitativas de la Universidad de California en San Francisco, junto a un grupo de colaboradores internacionales mapearon cientos de proteínas humanas y las proteínas virales que dependen de ellas, y elaboraron una lista de 69 compuestos con el potencial de interrumpir esas interacciones.

Casi 20 han entrado en ensayos clínicos contra la covid-19. Krogan está especialmente interesado en la plitidepsina, que proviene de una ascidia o tunicado de mar que se encuentra solo en las aguas de Ibiza. El medicamento ha mostrado ser efectivo en el tratamiento de ratones infectados con cada una de las principales variantes del SARS- CoV- 2. La farmacéutica española PharmaMar ha puesto en marcha un ensayo clínico de fase 3 de plitidepsina, que también se está explorando como posible tratamiento contra el cáncer.

Los especialistas coinciden en señalar que existe una clara necesidad de más tratamientos contra la covid . Hasta la fecha, la Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) ha dado su aprobación total a dos tratamientos contra la infección: el antiviral remdesivir, que se administra por vía intravenosa a adultos y algunos niños, y el regulador del sistema inmunitario baricitinib, que se administra a algunos adultos hospitalizados. La agencia también otorgó autorización de uso de emergencia a varios anticuerpos fabricados en laboratorio, así como a dos píldoras antivirales, Paxlovid y Lagevrio, que los pacientes con covid de leve a moderado pueden tomar en casa para reducir el desarrollo de una enfermedad grave.