Tomás Toranzo: «Hacen falta al menos 10.000 médicos más en Primaria de aquí a cinco años»

El recuento de acuerdos logrados en las últimas semanas entre CESM y los servicios de Salud de las distintas comunidades autónomas es positivo. Aún así, la Confederación ha declarado estos días que «se mantendrá vigilante» por si ese clima favorable responde a un interés meramente electoralista.

¿Cuáles son las demandas de la profesión con las que más empatizan los pacientes?

Básicamente, que tenemos la obligación de hacer viable y sostenible un Sistema Nacional de Salud (SNS) de calidad. No podemos permanecer callados mientras nuestro sistema de salud se hunde inexorablemente, con largas listas de espera, deterioro progresivo, deshumanización y pérdida de calidad, básicamente por el abandono y el maltrato laboral y profesional que sufren sus profesionales que, lógicamente, huyen a entornos más favorables.

¿Podría resumir los cambios necesarios para poder “salvar” los servicios de Atención Primaria (AP) y Urgencias?

En AP es fundamental mejorar su financiación, dotarlos de recursos para mejorar su capacidad asistencial y hacerlos más resolutivos para que puedan dar respuesta asistencial a la gran mayoría de las necesidades de los pacientes. A corto plazo, si una de las amenazas que van a gravar la carencia de especialistas son las enormes tasas de jubilación que se prevén para los próximos años, solo se puede solucionar posibilitando la prórroga voluntaria de la edad de jubilación, para lo que es necesario hacer más atractivas estas plazas. Además, habrá que aumentar la oferta MIR de Medicina Familiar y Comunitaria y agilizar la homologación de títulos de especialistas de países extracomunitarios. También hay que desburocratizarlos; dimensionar bien las plantillas de los profesionales para evitar la sobrecarga asistencial.

Un buen funcionamiento de la AP descargará a los hospitales y a los servicios de urgencias hospitalarios de gran parte de la demanda que hoy soportan, lo que ayudaría sobremanera a disminuir las listas de espera. En las Urgencias Hospitalarias y en los Servicios de Emergencias lo esencial es poder contar con especialistas formados, como ocurre en los países de nuestro entorno, creando la especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias.

¿Confía en que se logren acuerdos fructíferos y significativos en algunas regiones?

Si. Creo que en la mayoría de los servicios de salud se va a llegar a acuerdos con las demandas de los sindicatos médicos profesionales, porque son justas para solucionar problemas que ya veníamos anunciando y que se han agravado con la pandemia. En algunos regiones sin tener que llegar a convocatorias de huelga –como ha sido el caso de Murcia y en Castilla y León– donde ya está prácticamente cerrado un acuerdo.

¿Diría que el problema principal es el déficit de profesionales?

Diría que es uno de los más importantes, desde luego. En AP se habla de alrededor de unos 9.000-10.000 médicos, entre las que ya faltan y las que quedarán vacantes por jubilaciones en los próximos 5 años. En el resto de las especialidades también hay carencias, con lo que las necesidades de médicos en los próximos años, solo en el SNS, ascenderían a unos 12.000. Todo pone de manifiesto la pésima planificación que ha habido de los recursos humanos en España, donde el tan demandado registro de profesionales todavía es una quimera.

¿Cuánto cobra de media un facultativo de AP en el SNS?

El total bruto de las retribuciones, con una media de cuatro trienios y nivel dos de carrera profesional asciende a unos 53-58.000 €/año, según el servicio de salud. Si a ello añadimos las horas extras obligatorias anuales, incluidas noches, festivos y domingos (alrededor de 700 horas/año), las conocidas guardias médicas, se puede llegar a los 74-80.000 €/año. Pero estas cifras hay que ponerlas en contexto, ya que, en países de nuestro entorno como Alemania, Francia o Reino Unido, perciben entre un 71 y un 150% más que los ingresos anuales promedio en España.

¿Cuántos médicos extracomunitarios están trabajando en el SNS actualmente?

El dato es prácticamente imposible de conocer ya que no hay un registro fiable de profesionales, pero lo que sí se puede decir es que ha crecido mucho en los últimos años y que hay muchos que están trabajando en el SNS sin la titulación de especialista que exige la normativa legal en vigor, circunstancia que conoce perfectamente el Ministerio de Sanidad, aunque es cierto que quien contrata son los servicios de Salud de las distintas CC.AA.

¿Por qué nuestros médicos se van a otros países?

Porque tienen mejores ofertas laborales y profesionales y porque hoy día el idioma no es una barrera para la emigración.