Salud

Un 40% de los hombres mayores de 60 años presenta focos relacionados con el cáncer de próstata

Los expertos piden realizar revisiones periódicas a partir de los 45 en vistas de que si se detecta a tiempo la probabilidad de cura es muy alta

Las mujeres no tienen próstata, pero son un gran ejemplo
El cáncer de próstata tiende a crecer lentamente, lo que facilita un diagnóstico tempranolarazon

La probabilidad de desarrollar trastornos relacionados con la próstata aumenta "considerablemente" a partir de los 60 años, cuando un 40% de los hombres presentan foco relacionado con el cáncer prostático. Concretamente, los tres trastornos más frecuentes de la próstata son: la prostatitis (infección de la próstata); la hiperplasia prostática benigna; y el cáncer de próstata.

Así lo sostiene el jefe del Servicio de Urología y experto en Cirugía Robótica del Hospital Quirónsalud Torrevieja (Alicante), Sven Petry, con motivo del Día de la Salud Prostática, que se celebra en toda Europa cada 15 de septiembre, según ha informado el centro sanitario en un comunicado, del que se hace eco Ep.

Aunque estos trastornos no están relacionados entre sí, comparten ciertos síntomas. "La hiperplasia y a veces el cáncer de próstata pueden causar una dificultad para orinar, debido a la presión que la próstata agrandada ejerce sobre la uretra", señala Petry. "En el caso de la prostatitis, los síntomas son diferentes, como fiebre alta, dolor al orinar y al eyacular, debido a la inflamación aguda de la glándula", añade.

El cáncer de próstata tiende a crecer lentamente, lo que permite a numerosos pacientes recibir un diagnóstico en etapas tempranas. "Cuando se detecta a tiempo, la probabilidad de cura es muy, muy alta", valora el doctor. Para ello, los expertos recomiendan realizar exámenes regulares como el análisis de PSA y el examen rectal digital, especialmente en varones mayores de 45 años.

Si bien no existen medidas preventivas específicas para el cáncer de próstata, los especialistas en urología coinciden en que llevar un estilo de vida saludable es clave. "Una dieta equilibrada, rica en alimentos mediterráneos y baja en grasas, junto con la práctica de ejercicio físico, una vida sexual activa, evitar el tabaco y el consumo moderado de alcohol, son recomendaciones universales para reducir el riesgo de cáncer en general", aconseja Petry.