Agilidad mental: ¿Qué perro tomará la leche primero?

Los acertijos y los desafíos mentales están por todo internet. Son un entretenimiento tan divertido y tan accesible, que es muy común que se hagan virales a través de las redes sociales. Ahora bien, resolverlos no suele ser nada sencillo. En el caso del desafío de hoy, se trata de un acertijo bastante interesante. Hay cuatro perritos esperando pacientes a que les llegue su turno para beber la leche que caerá por las tuberías. ¿A cuál le tocará beber primero? Tienes medio minuto para responder:

¿Por qué es importante resolverlo?

Envejecer puede dar miedo, especialmente cuando percibimos que nuestra memoria y habilidades cognitivas empiezan a desvanecerse. ¡Pero no hay que entrar en pánico! Todo el mundo experimenta este cambio y no tiene por qué ser un signo de Alzheimer o demencia. Lo bueno es que podemos prevenir (o al menos ralentizar) este deterioro de nuestras capacidades cognitivas. Para conseguirlo, solo debemos mantener nuestra mente ejercitada, desafiándonos a nosotros mismos a diario.

Varios estudios respaldan la idea de que mantener nuestra mente activa durante toda la vida puede reducir hasta en un 50% las probabilidades de sufrir demencia. Y lo mejor es que nunca es tarde para empezar. O sea, que incluso si comienzas a ejercitar tu mente entre los 50 y los 60 años, todavía puedes obtener los beneficios. Resolver acertijos visuales y desafíos mentales es una excelente manera de mantener nuestro cerebro en forma y retrasar el proceso de envejecimiento.

Estos desafíos estimulan las conexiones neuronales y promueven la plasticidad cerebral, mejorando nuestra memoria, atención y otras funciones cognitivas. Pero no solo se trata de mantener nuestro cerebro saludable, también se trata de nuestro bienestar emocional. Al dedicar tiempo a aprender cosas nuevas y a desarrollar nuestras habilidades cognitivas, también estamos mejorando nuestro estado de ánimo. Enfocándonos en el desafío frente a nosotros, podemos tomar un respiro de los problemas diarios. Al liberar nuestra mente de preocupaciones y distracciones, aunque sea por unos minutos, podemos ayudar a reducir el estrés.

La solución:

Como puedes ver en la imagen, de los cuatro perritos, solo el segundo tenía el camino completamente despejado. Si has disfrutado con este reto y todavía te ves con fuerza para intentar resolver otros, quizás quieras pasar a otros desafíos que son bastante complicados. Te recomendamos otros desafíos de los que hemos compartido en La Razón con los que podrás poner a tu cerebro en un brete y mejorar así tus habilidades cognitivas.