Hollywood

«Boardwalk Empire»: Los corruptos años 20

Estreno de la cuarta temporada de «Boardwalk Empire» hoy en Canal +1 Hora: 21:30.
Estreno de la cuarta temporada de «Boardwalk Empire» hoy en Canal +1 Hora: 21:30.larazon

Violencia, corrupción, mercado negro de alcohol, garitos en los que nunca entra la luz y en los que se junta lo mejor de cada casa: gánsteres, políticos y agentes de la ley susceptibles de ser sobornados, mujeres que sueñan con Hollywood mientras interpretan el mejor papel de su vida como coristas y prostitutas, vividores de distinto pelaje... Pocos momentos históricos han calado tanto en la ficción audiovisual estadounidense como la ley seca que imperó en Estados Unidos en los años 20. Martin Scorsese, que ha retratado como nadie las cloacas de la delincuencia organizada, se alió con el poderoso canal por cable HBO para recrear este tiempo en la vibrante serie «Boardwalk Empire». Respaldada por la crítica y con una media de audiencia acumulada que ha llegado a superar los 8 millones de espectadores, Canal + 1 estrena hoy la cuarta temporada de esta producción –ya está confirmada una quinta– que atesora 12 premios Emmy y 2 Globos de Oro.

Los espectadores se reencontrarán con el amoral Nucky Thompson, interpretado magistralmente por ese actor tan atípico como hipnotizante llamado Steve Buscemi. La acción arranca en el mes de febrero de 1924. El brillo de las noches clandestinas regadas con whisky, bourbon y champán, que se bebe generosamente al ritmo del jazz y el charlestón, contrasta con el sombrío panorama que tiene por delante Thompson. Más mal que bien mantiene el control de su imperio en Atlantic City pero se ha convertido en un hombre aún más desconfiado y solitario. El contrabando de alcohol ya no es un negocio tan boyante como antes, por lo que decide diversificar sus actividades ilegales. Lo próximo será la droga y las turbias oportunidades inmobiliarias que llegan desde Florida. Para ello contará con la ayuda de Valentin Narcisse, que presume de haber hecho valer su ley en el Harlem neoyorquino.

A partir de ahí lo único que puede hacer el espectador es sucumbir a una serie que es fiel a su esencia y no sacrifica sus justificadas escenas de violencia, que se enriquecen con otras más intimistas en las que se pone el primer plano en la naturaleza contradictoria de los personajes.

Más allá de ser un fresco sobre el hampa, «Boardwalk Empire» también es un valioso documento histórico sobre la convulsa sociedad estadounidense de aquellos años.