Televisión

Jota Abril: «No soy de llorar por Twitter»

Periodista y presentador de televisión

Jota Abril: «No soy de llorar por Twitter»
Jota Abril: «No soy de llorar por Twitter»larazon

Jota Abril es un auténtico galán de la tele. Y no sólo por su físico imponente de andaluz guapetón de ojos transparentes sino, sobre todo, por su señorío. Da igual el momento en el que cualquiera se lo encuentre y donde lo haga: Jota siempre tiene la palabra amable a punto. Eso no significa que no tenga carácter –que lo tiene– o que sea melifluo en asuntos ideológicos – que suele mantener en el ámbito de lo privado porque «no me gustan las etiquetas», aunque a veces no se resista a opinar–, sino que hace gala de su buena educación en cualquier circunstancia, por complicada que sea. Quizá por eso ha conquistado a la audiencia de toda España en «Las mañanas» de TVE –donde aparece en la mesa de actualidad–, después de seis años en los Telenoticias de Telemadrid. En estos días, además de continuar pilotando su propia sección, conduce el resto del programa en sustitución de Mariló Montero y también sustituye a Inés Ballester en «Amigas y conocidas», de lunes a viernes, y presenta «Alfombra roja», en compañía de Berta Collado los fines de semana. Le digo que vale para todo y sonríe. «Bueno, si lo dices tú...Yo siempre me he considerado un presentador todo terreno. Y me gusta. Por eso espero que no le robe credibilidad un papel a otro. Yo lo veo compatible y espero que el espectador lo entienda... Porque si mañana me ofrecen un concurso también lo hago». La verdad es que si se revisa su currículo, desde que empezara en Play music en Canal 7, allá por el año 95, hasta ahora, está claro que Jota se adapta a todo y lo disfruta «sobre todo si es directo», me puntualiza. «Todos los programas que he hecho en Canal 7, en Canal Sur, en Telemadrid, en la radio, menos uno, han sido en directo. Es lo que más me gusta...». Charlamos sobre esa pasión suya por su trabajo. Por la tele, la radio, las galas, las presentaciones de empresa, los pregones y los demás eventos para los que le llaman sin parar y le digo que no me extraña que lo hagan porque siempre parece de buen humor y nunca pierdo los nervios. «Eso es porque llevo muchos años de directo, con vídeos que no entran, invitados que no llegan, el sonido que no va... Yo creo que ya hay pocas cosas que puedan pasar que me alteren en un plató. Lo curioso es que en él soy un tipo muy templado y controlo mucho, pero fuera soy muy nervioso». Siempre que veo a Jota en la tele está acompañado de mujeres. Y sé que se lleva bien con ellas, pero no sé si es que le han tocado en la partida o si preferiría compañeros masculinos. «Pues mira, he trabajado con Begoña Tormo, María Pelayo, Mariló Montero, Inés Ballester, contigo en alguna ocasión... Y ya sé que lo correcto es decir que todos somos iguales, pero yo creo que las mujeres tienen una capacidad que les hace ir por delante en todo, que nos viene muy bien a los hombres, aunque no lo digamos.» Recordamos los tiempos de Telemadrid y tantos días en los que Jota se enfrentaba a las tres horas de «Buenos días, Madrid», casi sin guión. «Es que cuando casi todo son directos por la mañana, en el guión llevas tres cositas y lo demás...», y también sus años de campanadas: «Para mí ha sido de las mejores cosas que he vivido en la tele. Es que para un tío normalito de Jaén, como yo, que te elijan para dar las campanadas... Subirme a la Puerta del Sol y ver el reloj como lo veía desde casa fue toda una experiencia. Y no lo hice una vez sino cinco, en una cadena tan importante como Telemadrid». Más importante es TVE. O al menos llega a más gente en España y en el mundo. Es decir, que la responsabilidad es mayor. Sobre todo, cuando se tiene que estar delante de la cámara tantas horas. Me pregunto si alguna vez habrá metido la pata o sentido miedo de hacerlo. «Mi mujer dice que soy un inconsciente –asegura riéndose– pero la verdad es que Tacho de la Calle–mítico realizador televisivo– me dio un consejo. Dijo: ‘‘Cuando tengas la más mínima duda, es preferible que no digas nada a que digas la mitad o digas más de la cuenta’’... Así que en la tele no se nota porque hablo mucho, pero me aguanto y no digo lo que no sé. Así que seguro que alguna vez habré metido la pata, cambiando un nombre o algo. Pero en cosas importantes no recuerdo... Aunque, claro, tengo una memoria muy selectiva» . Mejor, así no recordará los momentos tristes en la información, que también los hay. «Algunos es imposible olvidarlos. Hay noticias que te dejan muy tocado. Sobre todo las que tienen que ver con el sufrimiento de los niños. O incluso desilusiones cuando te involucras en algo. Como las candidaturas olímpicas de Madrid, que vivimos con mucha intensidad en Telemadrid y que luego acabaron en derrota.» Jota provoca empatía. Y lo hace por su cercanía y su sencillez y porque es muy galán... Claro que no sé si eso le gusta a todas las mujeres. «Si soy un galán, como tú dices, no tiene por qué no gustarle a las mujeres. Yo creo que no pasan de moda. Ser una persona educada, simpática e incluso un poquito conservadora en algunos aspectos no le hace mal a nadie. Yo, con las mujeres con las que he trabajado, nunca he tenido problemas.» Lleva mucho tiempo trabajando, pero es ahora cuando está logrando hacerse un hueco más grande. Y me pregunto si se mirará en el espejo de alguien. «No soy mucho de ídolos de ningún tipo –me dice–, más bien me gustaría ser una mezcla de muchos profesionales. Tener la simpatía de Jesús Vázquez, la naturalidad de Ramón García, el conocimiento de Iñaki Gabilondo y la capacidad de improvisación de Bertín Osborne».