«MasterChef», cocina con estrella

Más de 9.000 personas interesadas en participar en el programa y cerca de un millar asistiendo a las pruebas presenciales avalan el interés por este nuevo «talent show» que busca al mejor cocinero «amateur» de España. «MasterChef» –un formato de origen británico que ya ha sido producido en 37 países y vendido a 145 con récords de audiencia– es una de las grandes bazas de TVE para este año que busca dar una vuelta de tuerca al «talent show» al aunar espectáculo y servicio público. «Es un programa muy en nuestra línea porque, además de estar arraigado en la cocina, un sector en el que España es puntera, nos permite ofrecer al espectador una serie de valores como la pasión, la valentía, la superación, el fracaso como herramienta de aprendizaje y el enriquecimiento personal. Son cualidades que en estos momentos necesita el país», explica Carlos Mochales, director de programas de entretenimiento de TVE, quien destaca la receptividad del público español a los espacios de cocina: «Nuestro objetivo es que la gente sienta empatía con los concursantes y no sólo puedan ver cómo se superan ante las dificultades, sino que disfruten de una competición sana», añade.

Formatos de moda

Al frente del espacio estará la presentadora Eva González, que compartirá protagonismo con un reconocido jurado que suma cinco estrellas Michelin. Jordi Cruz, Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo Nájera serán los encargados de valorar las cualidades culinarias de los concursantes, aunque se alejarán del perfil más provocador de otras adaptaciones como la estadounidense, en la que el chef Ramsay («Pesadilla en la cocina») es uno de los protagonistas. «No buscamos un perfil de agresividad en nuestra cadena, aunque sí una personalidad más exigente. Los tres miembros del jurado tienen valores diferentes y se van a complementar», adelanta Mochales. El programa también contará con la colaboración de prestigiosos cocineros como Juan Mari y Elena Arzak, Pedro Subijana, los hermanos Roca, Quique Dacosta y Paco Roncero, entre otros, que impartirán clases exclusivas a los participantes.

El lanzamiento de este nuevo espacio culinario confirma que los fogones están de moda en televisión, como demuestran el éxito de la adaptación de «Pesadilla en la cocina» con Alberto Chicote y la audiencia fiel que mantiene Karlos Arguiñano en su programa de recetas. Pero más allá del clásico espacio gastronómico, desde la pública señalan que el atractivo de formatos como «MasterChef» es que permite descubrir la verdadera pasión de los concursantes. «Es un tipo de ''talent show'' muy auténtico y resulta interesante descubrir a personas cuya auténtica vocación es la cocina, pese a que no se dedican a ello de manera profesional», comenta Mochales.