Estados Unidos

Televisión a la carta

Un televisor a la carta
Un televisor a la cartalarazon

Aun día de la entrega de los premios Emmy, que cada año coronan a las mejores series televisivas, hay un punto que llama la atención desde el día que salieron los nombres de los candidatos: catorce de las nominaciones pertenecen a ficciones que jamás se han visto en la pequeña pantalla. De esta forma se presenta Netflix –el mayor videoclub on-line con un catálogo con más de 100.000 ejemplares– en la gala del domingo. Lo que empezó como una empresa de alquiler de películas a domicilio, ha terminado creando un gigante de la red y una importante productora de series, hasta el punto de ser comparada con HBO, que encarna la excelencia. Y es que, a parte de premiar la calidad, los Emmy marcan la tendencia de la televisión a medio y largo plazo, por ello, los expertos han comenzado a preguntarse si ésta es la dirección que tomará el mercado a partir de ahora.

Calidad y flexibilidad

Si hay que destacar uno de todos sus productos, sin duda sale el nombre de «House of Cards», ficción nominada a nueve galardones, entre los que destacan Mejor Serie Dramática, Mejor Actor (Kevin Spacey) y Mejor Actriz (Robin Wright). Como se puede ver con estos nombres, no se trata de un proyecto de bajo coste, aparte de actores contrastados, cuenta con un director importante como David Fincher («Se7en», «El club de la lucha» y «La red social»). Ahora, pase lo que pase en la entrega de galardones, «House of Cards» ha roto la barrera que impedía a las series de internet estar entre los títulos más prestigiosos de la pequeña pantalla. «Arrested Development» y «Orange is the New Black» son otros ejemplos de tramas que han triunfado on-line y que están nominadas a los premios. Dando un paso más, el portal anunció en julio que comenzaría a crear documentales y monólogos propios.

Dejando a un lado la calidad y su amplia oferta, el verdadero éxito que ha llevado a Netflix a tener más de 38 millones de suscriptores repartidos por todo el mundo –en España no se puede disfrutar por el «férreo control de las sociedades que gestionan los derechos»– radica en su accesibilidad y comodidad. Los programas pueden ser vistos donde se quiera, ordenadores, consolas, móviles, tabletas..., y cuando se pueda, sin horarios. Sin duda, la principal ventaja que ofrece la televisión a la carta.

Su flexibilidad, sumada a su precio –diez dólares al mes–, han llevado a Netflix a hacer frente a la televisión de pago: este videoclub ganó entre abril y junio 630.000 abonados sólo en Estados Unidos, mientras que la televisión de pago perdió 900.000 suscriptores en el último año. Con estos datos y un reciente estudio de Research & Market que certifica el crecimiento de la televisión a la carta, se ha especulado con el fin de la televisión por cable a largo plazo. Pero lejos de hipótesis lo que es un hecho son los 3.610 millones de dólares que generó Netflix en 2012 y el 220% que crecieron sus acciones en el último año.