En Rusia

Condenan a un influencer vegano por dejar morir de hambre a su bebé recién nacido, al que "alimentaba del sol"

Maxim Lyutyi quería convertir a su hijo, que llegó a pesar menos de dos kilos, en un "Superman"

El influencer vegano Maxim Lyutyi
El influencer vegano Maxim Lyutyi La RazónLa Razón

El influencer vegano Maxim Lyutyi, de 44 años, ha sido condenado a ocho años de prisión por dejar morir de hambre a su bebé de un mes, según lo dictaminó la justicia rusa. El hombre sometió al recién nacido a una llamada "dieta pránica", en la que se creía que el niño podría nutrirse únicamente de la energía solar (como si fueran plantas haciendo la fotosíntesis). Kosmos, como se llamaba el hijo de Lyutyi, llegó a pesar menos de dos kilos y finalmente murió por neumonía y desnutrición.

Lyutyi confesó ante la justicia rusa: "Mi hijo se alimentaba del sol. Ha muerto por mi culpa", argumentando que creía que el bebé podía obtener todos los nutrientes necesarios del astro.

Pese a que finalmente confesó su culpabilidad, Lyutyi había intentado culpar a su pareja, Oxana Mironova, otra influencer rusa, argumentando que el bebé tenía una deficiencia de hierro como resultado de las elecciones dietéticas de Mironova. La mujer fue condenada a dos años de trabajo correccional.

El medio británico Daily Mail reveló que Lyutyi, el padre, es un conocido propagandista de los alimentos crudos y un entrenador de estilo de vida. Es autor de métodos de "limpieza del cuerpo" y buscaba poner en práctica sus teorías con el niño. En un intento por experimentar con su hijo pequeño, al que quería convertir en un "Superman", el hombre (que cuenta con casi 60 mil seguidores en Instagram) no alimentó a su bebé y lo sometió a otros maltratos. Según el testimonio de la madre, Oxana Mironova, también lo sumergió en agua helada para fortalecerlo.

La familia de la madre, por su parte, comentó que ella era una "esclava" de Lyutyi, y que el influencer dirigía una secta. Todavía aturdidos por la desgracia, revelaron que el progenitor quería criar a un ser humano que solo se alimentara de luz solar y prohibió así a Mironova amamantar al pequeño, aunque ella lo siguió haciendo en secreto.

La Justicia rusa confirmó que el pequeño murió el 8 de marzo de 2023, tras ser llevado al hospital por una neumonía grave que se desarrolló como consecuencia de la desnutrición.