Gripe Aviar

Ni de corral ni de producción doméstica: estos son los huevos que tienen más posibilidades de estar contaminados por la Gripe Aviar

El riesgo sigue siendo muy bajo si se siguen las pautas de manipulación y cocinado adecuadas

Qué tipos de huevos hay y cuáles tienen más posibilidades de verse afectados por la Gripe Aviar
Qué tipos de huevos hay y cuáles tienen más posibilidades de verse afectados por la Gripe Aviaristock

La expansión de la gripe aviar en distintos países vuelve a poner el foco en la seguridad alimentaria y, en concreto, en los huevos. Aunque las autoridades sanitarias insisten en que el riesgo para el consumidor es muy bajo si el producto se manipula y cocina correctamente, sí existen diferencias entre los distintos sistemas de producción que pueden influir en su exposición al virus.

A continuación, repasamos los tipos de huevos más comunes y analizamos cuáles tienen más probabilidades de verse afectados en caso de brote.

Tipos de huevos más habituales en el mercado

1. Huevos de gallinas en jaula (producción intensiva)

Son los más comunes. Se obtienen en instalaciones altamente controladas y con estrictos protocolos de bioseguridad. La densidad de animales es muy alta, lo que significa que, si el virus entra, podría propagarse rápidamente. Sin embargo, el control sanitario suele minimizar el riesgo de entrada del virus.

2. Huevos de gallinas criadas en suelo

Las gallinas se mueven libremente dentro de naves cerradas. Aunque tienen más contacto entre sí y con el ambiente interior, siguen protegidas del exterior, por lo que el riesgo es moderado.

3. Huevos camperos

Las gallinas tienen acceso al aire libre. Esto las expone más a aves silvestres —especialmente acuáticas— que son uno de los principales reservorios de la gripe aviar. Por tanto, el riesgo de exposición es mayor que en los sistemas cerrados.

4. Huevos ecológicos

Las gallinas ecológicas también salen al exterior y siguen normas más estrictas de bienestar. Al igual que ocurre con los huevos camperos, el contacto con el entorno natural puede aumentar la posibilidad de interacción con aves portadoras del virus.

5. Huevos de otras especies (pato, ganso, codorniz)

Estos huevos son menos comunes, pero algunas de estas especies, especialmente los patos y gansos, pueden estar más expuestos al virus por su cercanía al medio acuático y a aves migratorias.

6. Huevos de producción doméstica o pequeños corrales

Suelen proceder de gallinas que viven en patios o pequeñas granjas con menor control sanitario y mayor contacto con aves silvestres. Este es uno de los entornos con más probabilidad de exposición al virus.

¿Cuáles tienen más posibilidades de verse afectados por la gripe aviar?

La vulnerabilidad de un sistema de producción no tiene que ver con el producto final —el huevo— sino con el nivel de exposición de las aves al virus. En este sentido, los expertos coinciden en que:

  • Los huevos con mayor riesgo de exposición al virus son los camperos, ecológicos y los procedentes de producción doméstica, debido al contacto potencial con aves silvestres.
  • Los sistemas intensivos y de gallinas en suelo, aunque albergan más animales, cuentan con medidas de bioseguridad más estrictas y un control sanitario continuo, lo que reduce la probabilidad de que el virus entre en las instalaciones.
  • Los huevos de pato o ganso también pueden presentar mayor riesgo, especialmente si proceden de explotaciones con acceso al exterior.

Aun así, la industria aplica protocolos muy estrictos: cuando se detecta un brote en una granja, se bloquea la comercialización de los huevos de inmediato y se activan medidas de contención.

¿Existe riesgo para el consumidor?

Las autoridades sanitarias señalan que no hay evidencia de contagio humano por consumir huevos correctamente cocinados, incluso en escenarios de brotes. El virus se inactiva a temperaturas de cocción habituales.

La recomendación es mantener la higiene habitual: conservar los huevos refrigerados, evitar el consumo crudo y cocinar completamente la clara y la yema.

Aunque todos los sistemas de producción están sujetos a vigilancia sanitaria, los huevos procedentes de gallinas con acceso al aire libre o de sistemas domésticos son los que más probabilidades tienen de verse expuestos a la gripe aviar. Sin embargo, para el consumidor final, el riesgo sigue siendo muy bajo si se siguen las pautas de manipulación y cocinado adecuadas.