Lluvia y ciencia

¿Cuál es el nombre que recibe el olor de la lluvia o tierra mojada?

El olor a lluvia satisface a nuestro sistema olfativo con su mera presencia. Sin embargo, es importante destacar cuáles son los procesos por los que pasa este fenómeno y el nombre que recibe.

Alerta por lluvias en Gipuzkoa
Mujer camina por Gipuzkoa durante un día de lluvia Onda Cero

Al igual que el perfume que desprende la gasolina o el pegamento, hay quienes adoran este aroma y quienes lo repudian incondicionalmente. De todos modos, este debate ha estado presente por los siglos de los siglos en las conversaciones de nuestro país. No obstante, el olor de la lluvia o tierra mojada suele captar la atención de la gente poniendo de acuerdo a apasionados y detractores de las esencias mencionadas con anterioridad. Y es que se ha comprobado que esta fragancia es el fruto de un proceso químico de la naturaleza que se produce con el impacto del agua de las gotas de lluvia en el suelo, frecuente, sobre todo, en las zonas donde predomina la sequedad.

La razón por la cual muchos seres humanos se ven atraídos por la mera existencia de esta fragancia cuenta con sus propias teorías. Quienes la aman alcanzan una paz y una tranquilidad contrarias a lo que de algún modo supone la lluvia para algunos. La explicación por la que nuestro sistema olfativo se estremece con este olor se debe a la extrema sensibilidad que tiene con respecto a la geosmina, incluso cuando las concentraciones de esta sustancia no son muy altas. Aunque sin embargo, su sabor causa un efecto adverso en las papilas gustativas. Este sentir de armonía y concordia con la naturaleza establece una conexión del ser humano con la misma.

Este suceso ha estimulado e inspirado a artistas y científicos por igual hasta el punto de escribir obras literarias y abrir investigaciones en torno a su leyenda. Sin ir más lejos, el poeta y escritor argentino, Jorge Luis Borges, a causa de su especial predilección por los sentimiento que le evocaba en su ser un día lluvioso, como el recuerdo y el pesar de la nostalgia, compuso "La lluvia". Asimismo se han realizado miles de estudios científicos que sitúan este fenómeno en el epicentro de la cuestión, hasta el punto de acuñar un nombre en específico al resultado de este desarrollo natural.

¿Cómo se llama el olor a la lluvia?

El olor del 'Petricor' es el componente principal que conforma este perfume de la naturaleza que cautiva tanto al sentido propio del ser humano. Esta denominación encuentra su autor en los científicos Isabel Joy Bear y Richard Thomas expuesto en su artículo publicado en la revista Nature, especializada en investigaciones tecnológicas, en el año 1964 que se titula Nature of Argillaceous Odor, traducido al español como 'Naturaleza del olor arcilloso'.

La composición de esta palabra guarda su origen en el exotismo griego y es el resultado de la conjunción de dos palabras con un simbolismo propio. En primera instancia nace de la palabra "petros" que significa "piedra", por otro lado, "icor" aporta la base romántica del asunto con su traducción al castellano como "el fluido de las venas de los dioses".

¿Por qué huele a lluvia y cómo se produce?

Para comenzar con la deconstrucción de este proceso, el principal agente que interfiere con un papel protagónico en el efecto de este aroma es una sustancia natural llamada geosmina, mencionada anteriormente. Esta sustancia no es más que un compuesto químico producido por bacterias del suelo. La lluvia al caer sobre una base porosa crea pequeñas burbujas que aumentan su tamaño flotando hasta llegar a la superficie donde se fractura emitiendo un aroma, la que nos agrada, liberando una esfervesnecia de aerosoles. Otro componente que atañe colateralmente a este proceso es el ozono, el cual contribuye a dicho olor intensificando dicha actividad con la presencia de electricidad. Este gas se entremezcla con los aerosoles expulsados por la geosmina y los aceites vegetales añadiendo diferentes texturas al producto de este perfume.