Detenida una mujer por obligar a ejercer la prostitución bajo amenaza de vudú

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Castellón, en el marco de la Operación Lago, a una mujer acusada de los presuntos delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, prostitución, amenazas, coacción, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal. Según ha informado el cuerpo de seguridad en un comunicado, junto a la mujer, de 44 años y nacionalidad nigeriana, también ha sido detenido a un hombre, también nigeriano, como presunto autor de un delito de falsedad documental y pertenencia a organización criminal, por falsificar documentos relacionados con las víctimas.

La investigación policial, bajo el nombre de Operación Lago, se inició en el mes de abril, tras la detección de una posible red de trata de seres humanos.

Tras las primeras pesquisas, los agentes averiguaron que podría tratarse de una red que captaba a mujeres en Nigeria, incluso a menores de edad, con la promesa de tener un trabajo en España y una vida con más posibilidades.

Ya en Castellón, alojaban a las mujeres en el piso de la principal imputada, donde les informaba que el trabajo no existía, y que su destino aquí en España iba a ser el de ejercer la prostitución en la calle, más concretamente en el Caminás, ya que tenían que devolverle el dinero que le había costado el viaje a España y que alcanzaban cifras hasta unos 50.000 euros.

Al parecer, a las mujeres que se negaban a ejercer la prostitución, les encerraban en las habitaciones de la vivienda de la detenida, sin poder salir, donde soportaban agresiones, y les negaban las necesidades más básicas, incluso de alimentación.

Además, eran constantemente amenazadas con rituales de "magia vudú", para lo cual les tomaban muestras de cabello, de vello de las axilas, uñas y sangre.

Para realizar su trabajo, las mujeres debían colocarse en lugares concretos del Caminás, y cumplir con un horario de doce horas diarias, todos los días de la semana hasta pagar su deuda.

Según el comunicado policial tampoco podían ofrecer servicios sexuales a personas de raza negra, y además deberían entregar semanalmente una importante suma de dinero, casi imposible de conseguir, a su captora, que amenazaba y agredía e incluso les negaba la comida si el dinero no era suficiente.

Además de los dos detenidos, se está investigando a más personas, ya que la red podría tener ramificaciones incluso fuera de nuestras fronteras.

Tras las detenciones, se realizó un registro domiciliario, la vivienda en la ciudad de Castellón, donde se intervino un ordenador, 3.500 euros, tres teléfonos móviles de última generación, junto a otro material documental que corroboraría la existencia y alcance de la red y están analizando los expertos policiales en la materia.

En el domicilio se hallaron varias bolsas de plástico con nombres de chicas, que contenían en su interior a su vez envoltorios con restos biológicos como uñas, vello, ropa interior con manchas de sangre, que supuestamente se empleaban en la magia o ritual "vudú", muy temida y respetada en ese país.

Los detenidos, han sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial, quien ha ordenado el ingreso en prisión de la mujer.