Detenido un fugitivo buscado por matar a su mujer por asfixia mecánica

La Polícia Judiciária de Portugal, tras una investigación llevada a cabo en España por la Policía Nacional, ha procedido a la detención de un fugitivo buscado por las autoridades españolas por un presunto delito de asesinato agravado al haber matado a su esposa por asfixia mecánica en la localidad madrileña de Collado Villalba. Fue detenido en la localidad portuguesa de Seixal después de que la Policía Nacional trasladara a los agentes portugueses la dirección exacta de su ubicación, donde fue arrestado cuando se encontraba reparando un vehículo.

Precisamente, el estudio realizado por la Policía Nacional sobre el perfil del fugitivo reveló que se trata de un habilidoso profesional de la mecánica de las piezas de turbo de vehículos a motor, dedicado tanto a la reparación como a la compraventa de este tipo de piezas. Este dato fue clave para su localización y detención en Portugal.

Los hechos se remontan a mayo del año 2017, cuando el fugitivo, tras llegar con su esposa de una cena con amigos, le golpeó y asesinó mediante asfixia mecánica hasta acabar con su vida en el domicilio familiar. El agresor fue enjuiciado por estos hechos ante el Tribunal del Jurado, siendo condenado finalmente a 22 años de prisión, a una pena de inhabilitación para ejercer la patria potestad y a unas penas de prohibición de aproximación y comunicación con su hija menor durante un periodo de 30 años.

No obstante, el fugitivo huyó antes de ingresar en prisión, cuando ya se había dictado la condena. Por este motivo, los intentos de notificación de las citaciones judiciales resultaron infructuosos, ya que el condenado se hallaba en paradero desconocido, por lo que no pudo ser hallado por ninguno de los cuerpos policiales de España.

El 30 de octubre de 2023 se ordenó por parte la autoridad judicial de Madrid la búsqueda y detención del fugitivo para su ingreso en prisión.

De este modo, la Policía Nacional procedió a la apertura de una compleja investigación con vistas a la localización y detención del prófugo. Se inició con el estudio y elaboración del perfil del fugitivo y de todo su entorno familiar, analizando cuidadosamente con quién pudiera tener contacto. De toda la información recopilada, se desprendió que era un habilidoso mecánico de motores, y se fueron abriendo diferentes líneas de investigación tanto dentro de España como en otros países de Europa.

En este sentido, una de las líneas de investigación que apuntaba a que el fugitivo se ocultaba en Portugal se fue reforzando al obtener indicios que le situaban cerca de Lisboa. De este modo, se intensificó la obtención de información específica en ese país.

Todo ello propició un intenso intercambio de información con la Polícia Judiciária de Portugal, y se fue desprendiendo que el fugitivo estaría viviendo en la localidad de Seixal, cercana a Lisboa, usando una identidad falsa a nombre de un ciudadano angoleño. Con esta identidad encubría transferencias de dinero. Junto a este ciudadano africano, el buscado regentaba un taller clandestino dedicado a la reparación de turbos de motores.

Tras aportarle a los agentes portugueses la dirección exacta obtenida durante la investigación, se procedió a su detención. En esos momentos se encontraba realizando una reparación junto al ciudadano angoleño, siendo sorprendido por los agentes de la Polícia Judiciária especializados en fugitivos. Los investigadores certificaron que, mientras el fugitivo estaba en Portugal, personas de su entorno usaban su identidad para hacer cargos bancarios en España como método para evitar su localización.