Educación

La «reválida» de 4º de la ESO: siete exámenes de hasta 15 preguntas

La prueba, similar a la de Bachillerato, se estrenará el curso próximo sin efectos académicos y contendrá «preguntas abiertas y semiabiertas»

Tanto las evaluaciones finales de ESO como las de Bachillerato tendrán una duración máxima de cuatro días
Tanto las evaluaciones finales de ESO como las de Bachillerato tendrán una duración máxima de cuatro díaslarazon

La prueba, similar a la de Bachillerato, se estrenará el curso próximo sin efectos académicos y contendrá «preguntas abiertas y semiabiertas»

Una semana después de anunciarse la «reválida» de Bachillerato acordada por el Ministerio de Educación y los rectores, el Gobierno perfila la prueba de evaluación final de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), cuya primera convocatoria se producirá en 2017. El borrador del proyecto de orden ministerial, al que ha tenido acceso LA RAZÓN, refleja las características de una prueba sin efectos académicos para el próximo curso, aunque sí en los posteriores, pero que busca «comprobar el logro de los objetivos de esta etapa», «garantizar que todo el alumnado alcance los niveles de aprendizaje adecuados» y «normalizar los estándares de titulación en todo el Sistema Educativo Español». El Ministerio «fija las características, el diseño y el contenido» de estas pruebas que se realizarán a alumnos de 15 y 16 años al finalizar 4º de la ESO. El borrador será tratado con las autonomías en la Conferencia Sectorial del 13 de mayo.

Siete asignaturas

El alumno se examinará de todas las troncales salvo Biología y Geología y Física y Química, quedando así Geografía e Historia, Lengua Castellana y Literatura, Matemáticas y Primera Lengua extranjera. A estas cuatro, hay que añadir otras dos cursadas en el bloque de troncales de 4º. Y, por último, el alumno elegirá una asignatura específica que no sea Educación Física, Religión o Valores Éticos.

Una hora por examen

Tanto las evaluaciones finales de ESO como las de Bachillerato tendrán una duración máxima de cuatro días, aunque las regiones con lengua cooficial podrían establecer una duración de cinco. Cada examen de la ESO durará 60 minutos, con un «descanso mínimo» de 15 minutos entre las pruebas. Mientras, las de Bachillerato abarcarán 90 minutos con pausas de 20 minutos.

50% de preguntas abiertas

El documento no refleja la inclusión de preguntas tipo test, como se barajó en un principio. Por contra, las pruebas contendrán «preguntas abiertas y semiabiertas» –el porcentaje de estas en cada prueba será del 50% como mínimo– que requerirán del alumno «capacidad de pensamiento crítico, reflexión y madurez». Las pruebas «estarán contextualizadas en entornos próximos al alumnado»: situaciones familiares, escolares, sociales... Por último, el número máximo de «preguntas o ítems» será de 15, y podrán realizarse tanto en soporte papel como en digital.

Sin rankings

El Ministerio subraya que los resultados de las evaluaciones serán comunicados directamente al centro, y que «en ningún caso» servirán para elaborar rankings. Cada comunidad autónoma trasladará los resultados tanto al colegio como al alumno. La nota será una media aritmética de todas las materias e irá de 0 a 10. Los padres, los tutores o el alumno podrán solicitar a cada Administración educativa su revisión.

Cuestionarios de contexto

La prueba incluye cuestionarios de contexto anónimos, tanto en ESO como en Bachillerato, dirigidos a alumnado, padres, profesorado y dirección del centro.