El 50% de los hogares españoles ha reducido su gasto en compra y consumen menos productos frescos

Aproximadamente la mitad de los hogares españoles han reducido el gasto en hacer la compra como método de ahorro, y ya no compran tantos productos frescos, reduciendo así la cantidad de carne y pescado, según el informe 'Alimentación y Sociedad en la España del siglo XXI' sobre los hábitos de alimentación de los españoles, realizado por la Fundación MAPFRE y la Universidad CEU San Pablo.

Dicho informe, basado en 2.000 encuestas, se realiza con el objetivo de conocer el impacto que tienen los estilos de vida en los hábitos de compra y consumo de los españoles, describir cómo se preparan los alimentos, con qué presupuesto cuentan las familias y qué nivel de conocimientos sobre los hábitos españoles tienen los españoles. La mayoría de los españoles, según el informe, realiza las tres comidas principales en casa, algo muy saludable ya que unido a otros hábitos como cocinar los alimentos a la plancha y al horno, comer acompañado, sentado y sin prisas, e incluso dormir más de siete horas, se asocia con menores niveles de obesidad y sobrepeso.

La excepción a esto está en grandes ciudades como Madrid o Barcelona, donde destaca el número de personas que come todos los días fuera de su casa debido a los horarios de trabajo, algo que también es común en estudiantes. Por zonas geográficas, el alimento preferido de la población es la pasta, excepto en la zona de Levante, que es el arroz, en las comunidades del noroeste, que prefieren el pescado, y en el norte, que son las verduras y las hortalizas.

Más saludables

En cuanto a los hábitos que los españoles tienen al hacer la compra, uno de los más frecuentes es buscar alimentos más saludables, comprobar la fecha de caducidad de los productos y comparar precios, lo que hace que el consumidor español sea cada vez menos fiel a las marcas y a ciertos establecimientos.

Por comunidades autónomas, los hábitos son diferentes: los andaluces son los que más comprueban la fecha de caducidad de los productos, y los murcianos los que más leen el eqtiquetado y se preocupan por la salud. Los que utilizan más la lista de la compra, buscan promociones de productos, comparan precios y compran alimentos con valor añadido son los extremeños, y los catalanes son los que escogen en mayor medida productos que sean respetuosos con el medio ambiente. Los aragoneses y castellanomanchegos buscan los alimentos más saludables cuando hacen la compra y los castellanoleoneses son los que más tiempo dedican a hacerla.

Los hogares con cuatro miembros son los que más gastan en compra (entre 150 y 300 euros mensuales), y el supermercado es el lugar más habitual para adquirir alimentos frescos y no perecederos, aunque con el aumento de la edad y la renta se cambia el supermercado por las tiendas de barrio y los mercdos tradicionales para comprar productos frescos.

En cuanto a los hábitos que los españoles cambiarían serían 'comer siempre a la misma hora', 'comer o cenar menos cantidad', y 'desayunar mejor'. Más de la mitad destaca que debería 'estar más informado' en lo que se refiere a conocimientos relacionados con la alimentación y la nutrición, una actitud que se observa con mayor frecuencia entre las personas con mayor nivel formativo y en las poblaciones de mayor tamaño.