Violencia de género
El ex marido de Juana Rivas: «Te arruinaré la vida con abogados, tengo dinero»
Condenado por maltrato, da de margen hasta el día 7 para que le lleve a sus hijos a Italia. La Audiencia de Granada podría suspender la obligación de devolver a los menores.
Condenado por maltrato, da de margen hasta el día 7 para que le lleve a sus hijos a Italia. La Audiencia de Granada podría suspender la obligación de devolver a los menores.
Los problemas entre Juana Rivas con su ex marido, Francesco Arcuri, condenado a tres meses de prisión por maltrato, crecieron cuando ella decidió ponerse a estudiar. En 2015 se apuntó a un curso de desarrollo personal que duró un año. Pero la situación se agravó cuando «le pedí que me dejara un espacio sin niños por una hora al día para estudiar...Pero ahí él ya no lo consintió. Dormía incluso en el salón para que no me conectara a internet y poder vigilarme, odiaba que estudiara y que me relacionara con gente, me insultaba de continuo, también era muy celoso si salía sin niños incluso al supermercado y me regañaba por el tiempo de duración de la compra...Este hombre es el primero que sufre su propia dolencia y lo expresa de una forma muy violenta...Me ha hecho pasar los momentos más aterradores de mi vida», relata Juana en una carta en la que cuenta su caso a la que ha tenido acceso LA RAZÓN. Aún resuena en su cabeza la amenaza que Francesco repetía de manera machacona: «“Te arruinaré la vida con abogados, tengo mucho dinero para hacerlo si me abandonas” y nos lo está demostrando», se lamenta Juana.
Mientras, sigue en paradero desconocido con sus dos hijos después de que el Tribunal Constitucional no admitiera a trámite su recurso de amparo en el que solicita la suspensión de la orden que le obliga a entregar a sus hijos a su ex pareja. Los niños, no obstante, prefieren vivir con la madre, como se constata en la sentencia que obliga a Juana a permitir que los menores vuelvan a Italia con el padre. Y eso a pesar de que el ex marido asegurara ayer a «Espejo Público» que Juana «tenía como prioridad el salir de fiesta. Era una buena madre, cuando estaba, en todos los sentidos. Cuando hacía de madre, lo hacía bien. Pero es que no estaba. La mayoría del tiempo no estaba», insistía.
Francesco Arcuri ha dado instrucciones a su abogado en Italia para que se ponga en contacto con el letrado que representa en Italia a Juana y abran negociaciones. Arcuri está dispuesto a retirar las denuncias que ha interpuesto ante la justicia española por sustracción de sus hijos si éstos llegan a Italia antes del día 7, dijo el letrado Adolfo Alonso a este periódico, justo un día antes de que tanto él como Juana Rivas deban comparecer en el Juzgado de Instrucción número 2 de Granada, encargado del caso.
La pugna por los hijos entre la pareja se libra en los tribunales y cualquier movimiento en este ámbito ayer lo consideraba clave Francisca Granados, directora del área de Igualdad y asesora jurídica del Centro de la Mujer de Maracena (Granada), localidad de residencia de Juana Rivas.
De momento, ayer se corrigió el «error procesal» que impidió que el Constitucional admitiese a trámite el caso de Juana. El abogado de oficio asignado a Juana Rivas en Madrid presentó la renuncia al recurso de queja planteado por este mismo caso ante el Tribunal Supremo, cosa que se debió haber hecho antes, según la asesora.
La Audiencia de Granada también admitió a trámite un incidente extraordinario de nulidad que podría suspender la resolución que obliga a la madre de los dos menores a restituir a sus hijos con su padre en Italia. No obstante, si no hay un pronunciamiento, la asesora jurídica de Juana ha manifestado que «volveremos a formalizar un recurso ante el Tribunal Constitucional a la mayor brevedad, porque es un procedimiento que no está agotado».
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