Reservas hídricas
Los embalses españoles resisten a la cuarta ola de calor del verano
Se encuentran al 53,8% de su capacidad, con lo que se mantiene el superávit alcanzado en Semana Santa
En el período más caluroso del año, los embalses españoles han resistido, en la medida de lo posible, las consecuencias de las temperaturas extremas. Así lo indican los datos proporcionados ayer por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que indicaban que los embalses españoles almacenaban 30.125 hectómetros cúbicos de agua, tal y como informa Servimedia. Esto supone un 53,8% de su capacidad total y 942 hm3 menos que en la última semana, coincidiendo con la recta final de la canícula, que suele ser el periodo más caluroso del año.
La reserva hídrica nacional en esta 33ª semana del año fue más alta respecto a 2020 (53,9%), pero sin embargo más baja que en 2021 (45,5%), 2022 (37,3%) y 2023 (39,9%).
Además, es un 3,1% superior a la media del último decenio, y mantiene el superávit alcanzado tras la pasada Semana Santa por primera vez desde mediados de diciembre de 2018. El déficit llegó a ser de un 36,1% menos de lo habitual a mediados de octubre del año 2022. Respecto a las precipitaciones de los últimos siete días, fueron fundamentalmente escasas en la vertiente atlántica, así como muy escasas en la mediterránea, encontrándose el valor máximo en Oviedo, donde se recogieron 8,8 litros por metro cuadrado.
Datos por cuencas
Los niveles más altos de agua en la actualidad corresponden a las cuencas internas del País Vasco (90,5%), el Cantábrico Occidental (81,4%), el Cantábrico Oriental (80,8%); Tinto, Odiel y Piedras en la cuenca atlántica de Andalucía (79,5%); el Miño-Sil (79,1%), el Duero (73,7%), Galicia Costa (64,5%), el Tajo (64,1%) y el Ebro (58,5%).
En el lado contrario, encontrándose por debajo del 50%, están el Júcar (44,8%), el Guadiana (42,8%), el Guadalquivir (35,7%), las cuencas internas de Cataluña (33,2%), la cuenca mediterránea andaluza (26,7%), el Guadalete-Barbate (23,7%) y el Segura (19,0%).
Situación crítica en el Segura
La Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) declaraba ayer la situación de sequía extraordinaria en la Unidad Territorial de Escasez (UTE) 1 Principal de la cuenca del Segura, de la que dependen las zonas regables de las Vegas Alta, Media y Baja, el Campo de Cartagena, el Valle del Guadalentín y las comarcas de Águilas y Mazarrón. Así lo avanzó el presidente de la CHS, Mario Urrea, para Ep antes de participar en una reunión ordinaria de la Comisión Permanente de la Sequía, que se celebraba ayer en la sede de la institución. Urrea explicaba que la ausencia de lluvias y el ritmo de vaciado de los embalses «está siendo ligeramente superior a lo previsto», de manera que se declarará la situación de sequía extraordinaria del subsistema cuenca, que ya se encontraba en alerta.
Como consecuencia, la CHS ha aumentado las restricciones a los agricultores, que pasarán al 35% para el regadío tradicional y del 49% para el consolidado. Los pimeros ya estaban en unas restricciones del 20%, mientras que las de los segundos eran del 30%. El objetivo de la Confederación es no llegar al final del año hidrológico con lo que se conoce como «embalse muerto», es decir, por debajo de los 40 hectómetros cúbicos de agua.
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