Encuentran a una mujer encadenada a un árbol en India con severos signos de desnutrición y deshidratación

Los hechos ocurrieron el pasado 27 de julio, cuando un pastor de vacas de la India, que se encontraba pastoreando su ganado en el bosque de Sindhudurg, en Maharashtra (India), escuchó unos gritos procedentes de un árbol. Al acercarse, el hombre vio cómo la mujer, que presentaba claros síntomas de desnutrición y deshidratación, tenía una de sus piernas encadenadas al árbol.

"El sonido procedía del bosque en la ladera de la montaña. Cuando fui allí, vi que una de sus piernas estaba atada a un árbol. Estaba gritando como un animal. Llamé a otros aldeanos y a la policía", declaró a la británica BBC en una entrevista tras el descubrimiento.

La mujer, Lalita Kayi Kumar, tenía 50 años y era de origen estadounidense, aunque llevaba residiendo en el país hindú desde hacía una década, tal y como señaló el medio 'Infobae', debido a que quería estudiar yoga y meditación. Así, tras ser alertadas, las autoridades acudieron rápidamente a la zona para cortar las cadenas y atender a Lalita.

La mujer fue trasladada al centro hospitalario debido a su cuadro de deshidratación y desnutrición severo, además de que presentaba hinchazón en la pierna que tenía encadenada, debido a la presión que ejercía la cadena.

Víctima de su marido

Lalita al principio no podía hablar, por lo que se estuvo comunicando con los agentes y los sanitarios a través de un bloc de notas. Así, la mujer afirmó que el responsable había sido su marido, quien la encadenó y la dejó en el bosque para que "muriera sin comida ni agua" durante los 40 días que aseguró haber estado allí amarrada, por lo que los agentes llegaron a considerarlo un intento de homicidio.

No obstante, las declaraciones levantaron sospechas entre los investigadores, ya que era muy difícil que tras 40 días sin comer y sin beber la mujer continuase con vida, por lo que empezaron a investigar en profundidad qué era lo que realmente había ocurrido.

Problemas de salud mental

Las investigaciones tardaron poco tiempo en dar su fruto y en desvelar cuál fue el verdadero motivo por el que la mujer había permanecido encadenada a un árbol durante un tiempo. Así, el jefe de Policía al cargo de la investigación desveló el pasado 6 de agosto que Lalita en realidad no estaba casada y que, probablemente, había sufrido alucinaciones durante su primera declaración.

Además, aseguró también haber encontrado entre sus pertenencias una copia de su pasaporte estadounidense y documentos que demostraban que tenía un visado indio vencido, además de unas recetas médicas.

En este sentido, tras conocerse estos hechos, la mujer rectificó su declaración anterior y aseguró haberse encadenado ella misma debido a los problemas legales y económicos que estaba atravesando. Por ello, fruto de la desesperación por la que estaba pasando, afirmó que decidió comprar candados y cadenas para atarse al árbol en el que fue encontrada.

De esta manera, cuando su salud física mejoró en el hospital, la mujer estadounidense fue trasladada a un centro psiquiátrico para recibir el tratamiento pertinente que, según asegura el director del centro, está recibiendo adecuadamente y está haciendo que "su condición esté mejorando".