Skimming

La "estafa de las gasolineras" que podría llegar a España en cualquier momento: casi 3.000 casos registrados en Francia

Los delincuentes emplean varias técnicas para llevar a cabo el fraude y sustraer dinero en efectivo o duplicar la tarjeta de la víctima

Hombre respostando en una gasolinera
Hombre respostando en una gasolineraJesús G. FeriaLa Razón

Como ya anticipaban aquellas películas americanas, donde los protagonistas se veían envueltos en un robo repentino en una estación de repostaje, la ficción ha vuelto a traspasar la gran pantalla y la "estafa de las gasolineras" ya es una realidad. Sin embargo, a diferencia de las historias ficticias, los métodos de operación de estos delincuentes es radicalmente distinto. En estos casos, no hay armamento de fuego de por medio ni mucho menos pasamontañas, pues, en realidad, el modus operandi de los mismos sitúa a la "falsa normalidad" como a piedra angular del fraude.

Durante los últimos meses, esta estafa ha adquirido importancia debido a la consecución de los casos registrados. Aunque todavía no ha llegado a España, la realidad es que la mayor actividad de este ejercicio se encuentra a las puertas de las fronteras de nuestro país. En efecto, Francia, el país vecino, ha registrado cerca de 3.000 casos desde el mes de enero, según ha informado el medio local Les Activateurs. Una cifra que preocupa debido a la propagación de esta tendencia y es posible que, de esta manera, se convierta en el nuevo peligro que aceche a las estaciones de servicio nacionales.

Por tanto, a la hora de realizar cualquier acción cuando nos aproximemos a un centro que cumpla las características mencionadas habrá que extremar la precaución para eludir que este efecto repercuta sobre nuestro bolsillo. Por el contrario, el gesto más contradictorio a la hora de identificar una estafa similar recae sobre la imprevisibilidad del actuante. Dependiendo de la dureza del caso, alguno asegura que han llegado a presenciar un hurto a la vieja usanza con violencia física de por medio mientras que otros aprovechan la bondad del prójimo para consumar el robo.

Una estafa pero varias técnicas a tener en cuenta

El nexo común que relaciona los cerca de tres mil casos registrados es la ubicación donde suceden estas situaciones. Por noma general, cuando alguien se dispone a reponer combustible para su vehículo personal lo hace bajo unas condiciones concretas donde el riesgo no se contempla. Por ende, los infractores aprovechan este temperamento para actuar en consecuencia. Dentro de todas las técnicas estudiadas, la más frecuente centra su atención en la necesidad imperante de un sujeto por pagar el combustible que ha repostado.

Como consecuencia de esto, el delincuente contacta con las víctimas, estacionadas en la misma gasolinera, y propone realizar un truque debido a que su tarjeta a priori no funciona y tampoco hay posibilidad de ejecutar el pago en efectivo. De esta suerte, el pago se concreta con el intercambio de dinero digital por billetes, que en realidad son falsificaciones. Otro de los casos más usuales atañen a la técnica skimming que supone la instalación de un dispositivo colocado encima de los cajeros de cobro automático para clonar la banda magnética de la tarjeta con la que se paga y replicarla en otro plástico. Pero se han llegado incluso a reportar precios erróneos con descuentos abusivos que imiten a promociones de carburante.

Cómo evitar caer en este fraude

Debido a la gravedad de los incidentes, las autoridades locales son conscientes de este terrible peligro y además de las patrullas desplegadas para tratar de refrenar la situación han añadido una serie de recomendaciones. Por ejemplo, contactar en caso de duda con los personales de la tienda para que te asesoren. En caso de dudar sobre la fiabilidad del terminal donde se lleva a cabo el pago del combustible, es recomendable recurrir a la ayuda personal con motivo de eludir un posible acontecimiento similar. Por supuesto, si eres víctima de alguno de estos fraudes, es de vital importancia ponerse en contacto con la policía y la entidad bancaria que trabaja tu dinero.