Entrevista

Francisco Rivera, psicólogo: "La ansiedad y la tristeza son emociones lógicas en la vuelta a la rutina, hay que planificar"

El especialista atendió a LA RAZÓN para explicar cómo afecta la vuelta al trabajo, la forma de afrontarla de manera llevadera y superar los momentos de dificultad. Destaca la importancia del autocuidado

Francisco Rivera, psicólogo, analiza en LA RAZÓN la vuelta a la rutina
Francisco Rivera, psicólogo, analiza en LA RAZÓN la vuelta a la rutinaLa Razón (cedida por Unobravo)

El fin de las vacaciones y la vuelta a la rutina nunca es un momento agradable, pero no todo el mundo lo afronta igual. Un estudio realizado por Unobravo junto a Dynata desvela que septiembre provoca estrés, ansiedad y tristeza para el 60% de los españoles. Concretamente, las emociones más asociadas al mes de septiembre son negativas, predominando el estrés (35,4%), seguido de la ansiedad (28%), la tristeza (23%) y la nostalgia (21,5%).

Francisco Rivera, psicólogo y Manager Clínico de Unobravo, atendió a LA RAZÓN para analizar y comprender a fondo estos datos. En la charla detalló cómo afecta la temida vuelta a la rutina, tanto a nivel general como en distintos colectivos concretos, reflexionando sobre los jóvenes, explicó por qué florecen esos sentimientos de tristeza, estrés y ansiedad, dejó un consejo a los españoles sobre cómo hacer más agradable dicha vuelta y puso el foco en un importante aspecto a nivel personal.

¿Cómo afecta la vuelta a la rutina a los españoles?

El psicólogo comenzó explicando los sentimientos habituales en el momento de la vuelta y explicando los datos del estudio: "A nivel general, la vuelta a la rutina suele ser uno de los factores que más cuesta. Es decir, como afirma el estudio, para el 60% de las personas en España volver a la rutina, concretamente ahora en septiembre, va a provocar estrés, ansiedad o tristeza, unas emociones que son muchas veces difíciles de gestionar".

"La vuelta a la rutina en septiembre se ha vuelto como el nuevo enero"

El experto hizo un paralelismo con el año nuevo: "Decimos en el estudio que esta vuelta a la rutina en septiembre se ha vuelto como el nuevo enero, es decir, como el nuevo comienzo del año. Sí que es cierto que esto no hay que ser catastrofista, porque hay muchas personas que también viven esta vuelta a la rutina con motivación, con entusiasmo, con esperanza… pero la verdad es que el número es mucho más bajo. Si tenemos un 60% de los españoles que ven esta ansiedad, estrés y esta tristeza, los que ven esta motivación, entusiasmo y esperanza, están en torno al 25%. Por lo tanto, los puntos de vista son muy diferentes".

Los jóvenes, los más afectados: así afecta la edad

Para entender estos sentimientos de tristeza, se le cuestionó sobre si afecta la edad para tener unos u otros sentimientos. Su respuesta es reveladora: "La verdad es que sí. Se ha visto que hay mucha diferencia por rango de edad. Tenemos, por un lado, lo que consideramos las personas jóvenes, es decir, personas que están entre 20 y 24 años. Y aquí es curioso, porque digamos que tenemos casi un 50% entre los jóvenes que ven la vuelta como estrés, que es un 49%, y otras personas que ven la vuelta como una motivación, como algo positivo, un 47%".

La salud mental es un tema clave para jóvenes
La salud mental es un tema clave para jóvenes REMITIDA UPVEuropa Press

Las personas más mayores, ya sea por la experiencia o por la simple costumbre, ven la vuelta a la rutina con menor agobio: "Si nos vamos a personas más adultas, la verdad es que cambia un poco la situación. Es decir, las personas adultas ven la vuelta a la rutina con un poco más de responsabilidad, no lo ven tan estresante, bajo un poquito el porcentaje. Pero el dato es curioso, sobre todo en los jóvenes, donde realmente vemos eso, vemos cómo tienen esa duda enfrentada entre el estrés y la motivación".

"La cultura del éxito, que impone al joven la obligación de alcanzar unos logros, genera una ansiedad super temprana"

Francisco Rivera detalla por qué los jóvenes sufren tanto cuando llega septiembre: "El tema de que a los jóvenes les afecte tantísimo refleja en gran parte el momento vital en el que están estas personas. Por un lado, estas personas jóvenes tienen la energía y las ganas de empezar proyectos, de crecer profesionalmente o de tener éxito en los estudios que estén haciendo, básicamente, ganas de avanzar en la vida. Pero al mismo tiempo, son personas que están más afectadas en cuanto, por ejemplo, a la presión social, que una persona con más edad. Son personas que tienen unas altísimas expectativas en todos los sentidos y esto genera una sobrecarga tremenda".

Ve la presión social como el principal culpable: "Aquí yo creo que se suma por un lado lo que es la cultura del éxito, que impone al joven la obligación de alcanzar unos logros, genera una ansiedad super temprana, y luego la sensación de estar siempre compitiendo. Entonces, creo que es ese el motivo por el que afecta de esta forma tan significativa a los jóvenes".

Las mujeres sufren más que los hombres

Si la edad influye, el género de la persona también. El psicólogo fue claro sobre si afecta igual a hombres y mujeres: "No, hay diferencias. La verdad es que hay diferencias entre hombres y mujeres, en el sentido de que las mujeres sienten lo que llamamos una carga mental más significativa. Primero, ¿qué es esto de la carga mental? La carga mental es trabajo invisible de la gestión. Y si nos vamos concretamente a ejemplos del estudio, es la gestión, por ejemplo, del hogar y la familia".

El especialista reveló por qué afecta más a las mujeres "¿Qué es lo que pasa? Hemos visto que el 33% de las mujeres, en concreto madres, se sienten más atrapadas en un ciclo de depresión, traslada a más agotamiento psicológico y autoexigencia frente a un 33% de los hombres. Por lo tanto, sí que desgraciadamente estamos viendo diferencias entre hombres y mujeres".

"No se trata solo de ayudar, sino de asumir la responsabilidad plena de todas las tareas y toda la carga emocional que tiene que poner en marcha toda la maquinaria"

Señaló el motivo por el que las mujeres sienten más el final de las vacaciones: "Yo creo que esto subraya la persistencia de los tipos de géneros, pues la distribución de las responsabilidades familiares Es decir, que todavía están existiendo esas diferencias entre hombres y mujeres. Y en ese sentido, lo que estamos viendo es que es crucial promover la corresponsabilidad y una comunicación abierta en tareas del hogar, en cómo planificar toda la vuelta, etcétera. Esto no es lo que decimos de que no se trata solo de ayudar, sino de asumir la responsabilidad plena de todas las tareas y toda la carga emocional que tiene que poner en marcha toda la maquinaria".

¿Cómo evitar la ansiedad, la tristeza y el estrés en la vuelta a la rutina?

Francisco Rivera explicó el funcionamiento de estas emociones para entenderlas y poder evitarlas: "Son emociones lógicas, las emociones tienen su función. Y darnos un aviso de que estabas muy bien hace unos días sin preocupaciones y ahora tenemos que prepararnos a la rutina".

"Lo ideal es tomar un par de días para planificar cómo va a ser la vuelta"

La planificación y la anticipación son las dos claves a su modo de ver: "¿Cómo hacerlo? Pues con una práctica que quizás no sea muy popular, pero es muy, muy efectiva. Es dedicando los últimos, a lo mejor dos días de nuestras vacaciones,a hacer una planificación de lo que va a venir. Siempre estamos apurando hasta el último momento. Todos los años vemos en las noticias cómo hasta el último día nos hace la operación retorno, montamos en los coches y casi, casi que llegamos, descargamos la maleta y tenemos que ir a trabajar al día siguiente. Lo ideal es tomar un par de días para planificar cómo va a ser la vuelta, hacer la compra, organizar la casa, ver qué actividades vamos a hacer, darnos también a nuestro propio cuerpo esa transición más gradual. Esta anticipación puede hacer que estas emociones, aunque existan, no sean tan intensas", afirma Francisco.

¿Qué debo hacer si he sucumbido ante la vuelta a rutina?

No es algo extraño verse superado por la vuelta al trabajo, al estudio, pero hay formas de contrarrestar estos sentimientos negativos. El psicólogo explica cómo hacerlo de forma sencilla: "En estos momentos, ponernos metas, es decir, igual que hemos disfrutado de un periodo vacacional donde hemos conseguido muchas cosas, también no solamente pensar en qué es lo que nos vamos a encontrar en el trabajo el día siguiente, sino también cuáles van a ser nuestras próximas vacaciones o incluso cositas más cercanas, momentos de ocio en fin de semana. Y luego también es muy importante atender a nuestro autocuidado".

"Autocuidarse es algo tan sencillo como en esa primera semana pararnos y respirar un poquito"

Para Francisco, no miramos lo suficiente hacia dentro: "Es algo que cuidamos mucho de los demás, pero muchas veces nosotros no nos cuidamos. Y autocuidarse es algo tan sencillo como en esa primera semana, de vez en cuando, pararnos, respirar un poquito, lo que decimos los psicólogos, una respiración consciente, tomarnos unos minutos para cerrar los ojos, para concentrarnos en nuestra respiración y para sentir un poco de calma".

Concentrarse en la respiración alivia el estrés, la ansiedad y la tristeza
Concentrarse en la respiración alivia el estrés, la ansiedad y la tristezaPexels

No es la única estrategia para poder salir del estrés, la tristeza o la ansiedad: "Otra técnica es establecer pequeñas metas realistas. Esto no es intentar hacer en esa semana todas las estrategias toda la planificación de golpes. En lugar de eso, vamos a pensar qué es lo que tenemos que hacer hoy, no toda la semana o incluso la próxima hora. Cumpliendo pequeños objetivos, lo que vamos a conseguir es algo muy importante que es la sensación de control y reducir la ansiedad que va a provocar pensar en ese futuro".

Pese a la importancia de ambas, vuelve al primer punto por su importancia: "Y por último, apelar de nuevo al autocuidado, es decir, intentar hacer pequeñas acciones, pero que sean significativas para nosotros. Y esas acciones pueden ser simplemente ponernos una música que nos guste mientras hacemos la cena o leer un ratito antes de dormir, dar un paseo, es decir, cosas muy pequeñitas pueden ser muy poderosas".