Indignación en Nueva Zelanda por el vídeo de un niño de nueve años alcoholizado

Un vídeo de un niño de nueva años borracho que se jacta de fumar marihuana y beber 18 latas de un cócte de whisky y refresco ha corrido como la pólvora por internet y ha provocado indignación en Nueva Zelanda, lugar en el que se grabó el vídeo. Filmado en un parque de patinaje, se puede ver al pequeño apoyado en una pared con una lata de bebida en la mano, que en pocos segundos se derrumba y cae al suelo. Cuando el autor de la grabación, Bradley Goudie, le quita la bebida de la mano y pregunta a una joven que ha permitido que el niño esté en esa situación, la chica responde que la bebida se la había proporcionado la tía del niño. El entrevistador sigue preguntando y el menor le indica que ha bebido 18 latas del cóctel de whisky y refresco de cola, pero le pide que no se lo cuente a la Policía. En el transcurso de la conversación, el niño reconoce que le gustaría fumar cannabis. Después, se recupera y camina hacia la pista de patinaje, donde se encuentra con chicos mayores. Uno de ellos, que dice ser su hermano, aclara que "él es maorí, es diferente"sin mostrar ningún ápice de preocupación por su estado de su hermano y reconoce que él también comenzó a beber a los nueve años. La conversación comienza a volverse tensa y Goudie decide marcharse.

Cuando la policía llegó al lugar, situado en un suburbio de la ciudad de Hamilton, el niño había desaparecido, pero lograron encontrar su domicilio. Los agentes, horrorizados, buscan al responsable de suministrarle el alcohol al niño. Su madre mostró su sorpresa al conocer el estado en el que se encontraba y explicó a los agentes que tenía la custodia del menor porque estaba separada y que no mantenía contacto alguno con el padre.