Asturias

Investigan a pirómanos por los incendios de Asturias

Tres especialistas de la Guardia Civil se han sumado a toda la Comandancia de Oviedo para averiguar las causas y las autorías de la oleada de fuegos. Esperan concluir la investigación en los próximos meses

Un vehículo de la Unidad Militar de Emergencias transita por una carretera cerca de una zona incendiada, en Asturias
Un vehículo de la Unidad Militar de Emergencias transita por una carretera cerca de una zona incendiada, en Asturiaslarazon

Tres especialistas de la Guardia Civil se han sumado a toda la Comandancia de Oviedo para averiguar las causas y las autorías de la oleada de fuegos. Esperan concluir la investigación en los próximos meses

Los 20 incendios forestales activos durante la mañana de ayer en Asturias bajaron a 11 al mediodía y, al cierre de esta edición, eran seis, de los cuales cuatro ya estaban controlados. Desde el Servicio de Emergencias de la región (SEPA) mandaban un mensaje de tranquilidad, ya que ninguno de los fuegos revestía especial gravedad, motivo por el cual el dispositivo de la Unidad Militar de Emergencias (UME) regresó a su base, mientras un centenar de efectivos continuaban trabajando. A la espera que estos fuegos queden extinguidos, lo cierto es que la situación poco tenía ya que ver con los más de 100 incendios que ha habido durante el fin de semana; una oleada de incendios que hay que investigar con el fin de esclarecer las causas y las autorías de los mismos. No se va a investigar cada uno de ellos, sino aquellos que se consideren singulares por repetir patrones o los focos que comenzaron a la vez o los que empezaron a determinadas horas en zonas sin riesgo. En el caso de la Guardia Civil, los agentes van aintentar esclarecer los incendios que a priori parecen delictivos. «Toda la plantilla de la Comandancia de Oviedo está movilizada en esta labor y se han enviado a tres especialistas de la unidad central», explica Salvador Ortega, capitán del Servicio de Protección de Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona). «Se está investigando a personas que tuvieron algo que ver con incendios en el pasado. Se trata de una de las líneas de investigación, pero no es la única», precisa Ortega.

Once tipos de indicios

Para ello la Benemérita analiza «11 tipos de indicios. Uno de ellos es el patrón de quemas, investigar por dónde ha entrado y salido el fuego» viendo qué parte de las piedras se ha quemado, analizando cómo ha avanzado el fuego en las hierbas quemadas, etcétera. «También se analizan los lascamientos. Al desecarse los árboles se contrae la corteza y se desprende en trozos. Las lascas en el tronco permiten saber por dónde ha avanzado el fuego, ya que encontramos lascas en el lado opuesto de donde éste ha entrado», detalla.

Tras analizar los modelos de carbonización, toca ya «rastrear» el punto de inicio. «Tras acotar aproximadamente 100 m2 de terreno (aunque esto varía según cada incendio), se tiran con cuerda calles de un metro de ancho y se procede a poner piquetas e hilos separados sobre el terreno», precisa el capitán del Seprona. «Ya, rodilla sobre la tierra –prosigue–, revisamos con una regla centímetro a centímetro buscando cualquier detalle, punto de origen, huella, mechero, causas. Al localizar el punto de origen, se toman muestras de tierra por abajo para poder analizar si se han usado acelerantes, como gasolina».

Pero si la parte material de la investigación es muy importante, la personal es fundamental para confirmar la parte técnica de la investigación». Para ello, además de entrevistar a testigos y vecinos, también se tiene en cuenta «si una persona ha tenido alguna disputa o si ha sido denunciada por algo que pueda tener algún tipo de relación. Y se entrevista a vecinos o personas que puedan ser los presuntos culpables», como explicó Jaime Martín, jefe de Bomberos del SEPA. Lo habitual en estos casos es que se trate de alguien de la zona.

Respecto a los tiempos, «en un incendio individual se tardan horas, semanas, o dos o tres meses, pero al ser una ola de incendios lo que ha sucedido en Asturias hay que sopesar la problemática social de una comarca y de otra, verlo en clave económica. En definitiva, hacer un estudio socioeconómico del entorno, lo que lleva más tiempo. En la oleada de incendios que hubo en 2006 en Galicia fue necesario un año para emitir el informe. En esta ocasión, esperamos tenerlos aclarados en los próximos meses, pero no se puede saber cuánto tiempo se requerirá», concluye el capitán del Seprona.

Uno de cada seis autores es imputado

«En al menos el 50% de los incendios forestales criminales esclarecemos las causas», explica el capitán del Seprona. Este año «hemos esclarecido el 35% de las causas y su autoría», añade Ortega. A la espera de que acabe 2015 para poder saber a cuántos autores se detiene e imputa, Ortega precisa que «como media en España detenemos e imputamos a uno de cada seis autores de incendios forestales».