Religión
Los jóvenes españoles «toman» la Plaza de San Pedro para el jubileo
Más de 30.000 peregrinos han celebrado un encuentro en el Vaticano, previo a la misa y la vigilia jubilar con León XIVI
La Plaza de San Pedro del Vaticano se ha cerrado ex profeso para acoger un multitudinario encuentro con los cerca de 30.000 peregrinos españoles que participan a lo largo de este fin de semana en el jubileo de los jóvenes. Se trata de un hecho inédito, en tanto que no es ni mucho menos habitual que la Santa Sede dé el visto bueno a que un país celebre un foro nacional en este enclave. Sin embargo, la masiva respuesta de la Iglesia española a participar en esta cita que culminará en una vigilia y una eucaristía con León XIV en Tor Vergata, ha llevado a las autoridades vaticanas a dar el plácet para una tarde de catequesis, testimonio, música y eucaristía. No en vano, España es la segunda delegación más numerosa en esta cita jubilar, solo por detrás de Italia.
La cita «made in Spain» ha arrancado a las seis de la tarde como una marea verde, el color de las camisetas preparadas ex profeso para la ocasión. Entre canciones de Hakuna, Kairoi, Brotes de Olivo y otros grupos interpretadas por el coro dirigido por el sacerdote Toño Casado, se escucharon las voces de algunos peregrinos que compartieron sus inquietudes vocacionales. Como José Tomás, joven de 26 años de Tarancón que, después de romper con su novia y participar en un retiro de Effetá, aseguró ante la multitud que «realmente conocí a Dios».
El matrimonio formado por Quique Mira y Mery Lorenzo Warleta, de Aute, una nueva realidad eclesial, compartieron que «la felicidad no está en encerrarse, sino en amar y dejarse amar». María Tagarro, procedente de Astorga, dijo ante el micrófono que vivir la fe «me ayuda a celebrar los sacramentos, tener una vida ordenada de oración, conocer las necesidades de las personas que lo pasan mal, comprometerme en pequeños compromisos de servicio y apostolado…».
«Este es un viaje santo que permite expresar lo mejor de nosotros mismos, desde la conciencia de ser cristianos y de ser Iglesia», ha comentado el presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, que fue el encargado de presidir la eucaristía con la que se cerró el encuentro y que estuvo concelebrada por medio centenar de obispos. Para Argüello, peregrinar a Roma permite «experimentar la catolicidad con toda su fuerza». «Es la hora del amor, de la unidad y de la paz, como nos grita León XIV», remarcó el arzobispo.
«Los jóvenes son conscientes de que en estos días van a vivir un momento que les va a dejar huella en sus vidas, por eso queremos hacer todo lo posible para que se acerquen a Jesucristo», ha dicho por su parte el coordinador de esta gran peregrinación, el sacerdote Raúl Tinajero, director de la Subcomisión para la juventud e infancia de la Conferencia Episcopal Española.