#Me too: Denuncias de acoso en los pasillos del Europarlamento

Varios informes apuntan a un problema generalizado en Bruselas que da «escalofríos».

urodiputados de todos los signos políticos coincidieron ayer en condenar casos de acoso sexual dentro del Parlamento Europeo (PE) que una investigación periodística ha sacado a la luz en la última semana, a raíz del estallido del escándalo en torno al acoso sistemático del productor Harvey Weinstein en Hollywood.

El pasado 16 octubre las redes sociales se movilizaron. Con la campaña en internet #MeToo (yo también) y las investigaciones del diario británico «Sunday Times» han destapado más casos de abusos que salpican a la propia Eurocámara. En concreto, el medio menciona «más de una docena» de casos de asistentes abusadas por eurodiputados.

En el pleno celebrado ayer en Estrasburgo (Francia), eurodiputados de prácticamente todo el arco político manifestaron ser conscientes de serias alegaciones de acoso contra otros miembros del Parlamento Europeo (PE). Junto con la comisaria europea Cecilia Malmström, debatieron las medidas vigentes, así como las que debería tomar la UE para prevenir y combatir el acoso y abuso sexual. Una violencia que en muchas ocasiones no sale a la luz y que tienen su origen en las relaciones de poder. Por esta razón, la eurodiputada socialista Iratxe García denunció que la realidad del acoso sexual «no escapa a ningún espacio, ni siquiera a las instituciones públicas». «Ni siquiera de este Parlamento», advirtió tajante.

«El Parlamento Europeo por desgracia, como cualquier otro lugar de trabajo no está inmune de este tipo de conducta deplorable», denunció la eurodiputada italiana Daniela Aiuto del grupo Europa de la Libertad y de la Democracia Directa. Ahora se ha roto el silencio, también en la institución. En su opinión, la Eurocámara deberá hacer limpieza inmediata para no correr el riesgo de que su autoridad pueda verse dañada.

«Podemos ponernos una venda en los ojos y pensar que esto no tiene nada que ver con nosotros, o podemos dar visibilidad a la situación y poner soluciones sobre la mesa», pidió García. El Parlamento Europeo ayer habló alto y claro y por el momento, ha arrojado luz sobre una cuestión que no es corriente debatir en muchos parlamentos occidentales. Es por ello que los eurodiputados pidieron en una resolución reforzar medidas con asesoramiento externo para evaluar de qué manera pueden resultar útiles a las víctimas que presenten quejas por acoso. Con todo ello, el PE quiere que las víctimas dejen de tener miedo, «que no tengan vergüenza», insistió García.

En esta línea también se pronunció la eurodiputada alemana de los Verdes, Terry Reintke, porque «la vergüenza tiene que ser de los autores de estos abusos». Pidió una directiva y alertó de informes que dan «escalofríos». Durante el pleno, Reintke, al igual que otras muchas eurodiputadas, sostenía carteles con el lema #MeToo, que ha dado visibilidad a este problema en Twitter y Facebook.

El borrador de la resolución hace un llamamiento para examinar de forma urgente y exhaustiva los recientes informes de los medios sobre acoso y abuso sexual en el PE, y garantizar la implementación de un plan de acción fuerte y efectivo contra el acoso sexual. El problema es, según la eurodiputada popular polaca Agnieszka Kozlowska, «generalizado y omnipresente» y dijo que «es difícil encontrar una mujer que no lo haya sufrido».