Mascotas

Collares de actividad para medir la forma física de los perros

Según los fabricantes de estos dispositivos inteligentes, al año se extravían en el mundo alrededor de diez millones de mascotas
Según los fabricantes de estos dispositivos inteligentes, al año se extravían en el mundo alrededor de diez millones de mascotaslarazon

Tener un animal de compañía es una responsabilidad que incumbe a todos los miembros de la familia. No son pocas cosas las que hay que tener siempre en la mente: darles comida, cobijo y cariño son las más importantes. Esos tres factores son fundamentales para que las mascotas estén felices, pero siempre junto a sacarlos a pasear al menos tres veces al día. En estos momentos de recreo los perros pueden hacer el ejercicio necesario para quemar todas las calorías que consumen a lo largo del día y mantenerse así en plena forma. Por eso, varias empresas han desarrollado una herramientas que hace posible medir estos ratos de ejercicio: los collares de actividad para canes son una realidad y han llegado para quedarse.

El principal propósito de estos collares inteligentes es que, al igual que nosotros, los perros también lleven unos hábitos de vida saludable, unas rutinas que para ellos son igual de necesarias. Pero las posibilidades van más allá, porque los dueños también pueden establecer objetivos para que su can se supere a sí mismo cada día. Y como hoy en día toda nuestra vida está en el teléfono móvil, estos collares se pueden sincronizar con una App a los dispositivos que usen Android o iOs. Es más, incluso se pueden configurar para que lancen notificaciones periódicas sobre los diferentes aspectos que mide este adelanto tecnológico y que mejorará la vida de los reyes de la casa. El dispositivo se puede configurar para que recuerde a los dueños el momento en el que sus mascotas deben tomar la medicación, en el caso de que la necesiten.

Estos accesorios cuentan con la tecnología más puntera disponible en la actualidad en el mercado y por ello incorporan funciones interesantes que pueden resultar de gran utilidad para comprobar los cambios de comportamiento que experimente el animal a largo plazo o también para conocer de primera mano sus progresos en el terreno físico. Sin embargo, puede que la característica más necesaria sea la posibilidad de rastrear al chucho vía señal GPS. Y si no que se lo digan a los que han vivido los momentos de angustia que provoca el no saber a ciencia cierta en qué lugar se encuentra su mascota.

«Asegúrate de que siempre llega a casa a salvo», reza uno de los lemas de las empresas que desarrollan estos collares inteligentes. Según los datos que manejan, al año se extravían en todo el mundo alrededor de diez millones de animales de compañía, unas cifras alarmantes que ahora luchan por disminuir.

Ya sea porque alguien se dejó la puerta abierta en un descuido, porque se rompió la malla de la ventana cuyo fin era evitar excursiones inesperadas, o incluso debido a que el siempre «fiel compañero» no volvió tras su cotidiana exploración por los terrenos conocidos. De darse alguno de estos supuestos, el dueño podrá localizar de forma inmediata al animal y conocer al instante en su teléfono móvil el camino que siguió en los momentos en los que estuvo fuera de vigilancia.

Y la cosa no se queda ahí. Los modelos más sofisticados permiten incluso que los humanos se comuniquen con sus mascotas a través del propio collar, al llevar incorporado un micrófono y una salida de audio. Así, el dispositivo podrá emitir sonidos en unas frecuencias que no son audibles para los humanos pero sí para los canes, lo que lo convierte en una buena manera de premiarlos cuando hacen las cosas bien o incluso de hacerles saber con señales sonoras cuándo su comportamiento no está siendo el adecuado.

Los últimos avances permiten, en algunos casos, introducir en el accesorio una cámara que graba en alta definición y que puede retransmitir en directo los pasos del perro. Algunas incluso toman fotografías que después se podrán compartir en redes sociales para presumir de mascota.

Por supuesto, como no se puede controlar en qué lugares va a meter el hocico el can, la mayoría de modelos son resistentes al agua y tienen una batería de diez días de autonomía. También es muy útil para las mascotas que duermen en una caseta en el jardín, ya que muchos modelos incorporan sensores que miden la temperatura ambiental. Así, el dueño sabrá en todo momento si el animal tiene frío o calor y en los momentos más sofocantes del verano y más crudos del invierno podrá meterlo dentro de la vivienda principal.

Aunque pueda parecer lo contrario viendo todas las prestaciones que ofrecen, la realidad es que estos collares de actividad tienen precios asequibles y aptos para todos los bolsillos. Los más simples, los que no incorporan la función de rastreo mediante GPS, se pueden encontrar por algo más de cien euros. Los más sofisticados no superan los 250 euros.