Ganadería

Cuando el lobo es amigo del pastor

Un estudio sugiere que ayudan al control de enfermedades del ganado

Un ejemplar de lobo ibérico / Pixabay
Un ejemplar de lobo ibérico / Pixabaylarazon

La revista científica ‘Scientific Reports’ ha publicado este martes los resultados de una investigación multidisciplinar en el que se pone de manifiesto que los lobos pueden ser grandes aliados para los ganaderos, ya que contribuyen al control de enfermedades del ganado, informa Efe.

El artículo científico, al que ha tenido acceso Efe, aporta otro ángulo de debate en torno al lobo, y cómo su contribución al control de jabalíes, paradójicamente, ayuda a la ganadería.

En Castilla y León, de acuerdo al último censo hay 191 manadas de lobos de las 297 de todas España.

Un equipo de investigadores hispano-británico ha centrado su trabajo en combinar datos de campo con modelos matemáticos con los que han estudiado la compleja relación entre lobos, jabalíes y vacas, influida por una enfermedad crónica como la tuberculosis.

El jabalí mantiene la tuberculosis en el medio natural siendo la vaca su principal víctima y también la especie diana de los controles sanitarios oficiales.

El estudio indica que la depredación de jabalíes por el lobo puede contribuir al control de esta enfermedad.

Los resultados demuestran que el lobo contribuye a regular las poblaciones de jabalí y que esta depredación puede llevar a una marcada reducción de la infección por tuberculosis.

Así lo ha asegurado a Efe la profesora Ana Balseiro, del departamento de Sanidad Animal de la Universidad de León y coautora del trabajo, quien ha asegurado que «la tuberculosis disminuye en el jabalí cuando hay lobos, y aumenta en vacas cuando no los hay».

Un hallazgo clave de esta investigación «es que una población animal que alberga una infección grave puede ser regulada o mantenida a una determinada densidad, tanto por la propia enfermedad, si hay muchos infectados, como por la depredación, con lo que habría menos infectados».

Por lo tanto, ha apuntado que «los depredadores como el lobo están proporcionando un importante servicio ecosistémico al ganadero».

Jaime Marcos, del Servicio de Caza del Gobierno del Principado de Asturias, ha comentado que este efecto beneficioso debería reconocerse en relación con los habituales conflictos entre humanos y carnívoros.

Marcos ha sugerido que «los lobos podrían jugar un papel clave en el control de la tuberculosis» y ha recordado que en Asturias, el coste anual de la compensación pagada a los ganaderos por daños de lobo, algo superior al millón de euros, es una cuarta parte de los gastos anuales del plan de erradicación de la tuberculosis que supera los 4,1 millones de euros.

Christian Gortázar, que dirige este estudio desde el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC), perteneciente a la Universidad de Castilla-La Mancha y el CSIC, ha resaltado que el lobo, en algunas provincias españolas como Asturias, donde «no hay pocos», resulta positivo para la conservación de los procesos naturales e incluso para la imagen turística de la Cordillera Cantábrica.

Sin embargo, los ganaderos de montaña sufren las consecuencias de soportar importantes pérdidas en sus rebaños que, aunque son compensadas, siempre les parecen escasas y se dilatan en el tiempo.

«Nuestra investigación aporta otro ángulo al debate en torno al lobo, ya que su contribución al control de jabalíes, paradójicamente, ayuda a la ganadería controlando la infección por tuberculosis», ha explicado.

Para Gortázar, «el lobo, que es a la vez una especie muy mediática y un problema para la ganadería de montaña, necesita de una gestión sensata», ha concluido. EFE