Mar de Barents

Menos pesca en el Atlántico Norte, buenas noticias para las especies

En los últimos años se ha extendido una práctica poco recomendable, que es la destripar a los peces en alta mar y arrojar sus vísceras al agua | Fotografía de archivo
En los últimos años se ha extendido una práctica poco recomendable, que es la destripar a los peces en alta mar y arrojar sus vísceras al agua | Fotografía de archivolarazon

Científicos del International Council for the Exploration of the Sea (ICES) han concluido que la explotación pesquera en el noreste atlántico se ha reducido significativamente en la última década. Muchos stocks pesqueros -como el bacalao en Islandia, Báltico y Mar de Barents, platija en el Mar del Norte, arenque en los Mares de Noruega , Baltico y Mar del Norte, y el espadín en el Mar Báltico - han sido explotados de manera sostenible, de acuerdo con los objetivos establecidos por los responsables políticos, y las poblaciones de peces han comenzado a mejorar.

"La reducción de la explotación es el primer paso para la recuperación de las poblaciones de peces y el logro de un estado saludable de los ecosistemas ", explica el jefe de Servicios de Asesoría del ICES, Poul Degnbol.

Las mejoras no han sido las mismas para todas las especies y regiones. Por ejemplo, la explotación de bacalao y eglefino en la región de las Islas Feroe se ha mantenido alta durante las últimas décadas en comparación con una disminución marcada de la presión pesquera para la misma especie en otras regiones, informa el Instituto Español de Oceanografía en una nota de prensa.

Además, sigue habiendo stocks con poblaciones bajas, como el bacalao del mar de Irlanda, el Kattegat y el oeste de Escocia, por lo que el ICES recomienda que no debe hacerse una pesca dirigida y se deben reducir al mínimo las capturas incidentales para estas especies.

Por el contrario, otras poblaciones como el bacalao del Ártico nororiental y la bacaladilla de amplia distribución, siguen aumentando su biomasa.

Estas reducciones significativas en la presión pesquera se deben, según los expertos, a varios factores. Por un lado las reducciones de las cuotas basadas en un mejor conocimiento científico, pero también por las condiciones cambiantes del mercado y los aumentos en los precios del combustible.

Estas conclusiones son el resultado de la reunión anual del Comité Asesor del ICES (ACOM), celebrada la primera semana de diciembre en Copenhague, Dinamarca, donde los científicos examinaron tendencias históricas de la explotación de los 85 principales poblaciones de peces en el Atlántico noreste.