Medidas económicas

Mejor educar que cobrar

La Razón
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En la actualidad, los accidentes de tráfico representan un problema social de gran calado que afecta tanto a las administraciones como usuarios en general. En este sentido, las herramientas y políticas estratégicas que se utilizan para reducir la siniestralidad son muy variadas, pasado por mediadas preventivas, educativas, formativas, informativas hasta llegar a las coercitivas o represivas.

Desde el RACE consideramos que la Administración debe potenciar y apostar por aquellas medidas que garanticen el máximo beneficio para el conjunto de la población; en este sentido se encuentran las políticas, educativas y formativas, que garantizan un mejor aprendizaje y sobre todo, un respeto a la norma superior a las políticas represivas y coercitivas en ausencia de la autoridad (agentes de tráfico, radares, cámaras, etc.).

Siempre hemos defendido que la mejor forma de respetar las normas es creer en ellas, y en el ámbito de la seguridad, éstas debe ser creíbles para que no se infrinjan en ausencia de radares o agentes de tráfico. Para ello es fundamental apostar por campañas educativas y formativas, dejando la sanción para aquellos colectivos reincidentes.

Una Administración que tiene que cumplir con el objetivo de reducir el número de fallecidos y heridos graves en carretera no puede supeditar su actuaciones al presupuesto de sanciones obtenido. Las sanciones deberían ser el último recurso para la formación de los conductores, al igual que el presupuesto de sanciones debería ser mínimo, disponiendo así de conductores educados y una Administración comprometida con el ciudadano.

*Director de Seguridad Vial de RACE