Hostelería
La mitad de los bares y restaurantes de Marruecos, amenazados de cierre
La falta de una legislación, impuestos y la crisis económica, principales causas del problema
El sector de la pequeña hostelería en Marruecos no pasa por su mejor momento y se anuncia que, tras la celebración del Campeonato de África de fútbol, que tiene lugar en Costa de Marfil y atrae a clientes a estos locales, cerrarán casi la mitad de los mismos. Según medios digitales del país vecino, esta situación deviene “de un conjunto de restricciones conocidas en el sector; la alta demanda de espectadores de eventos deportivos no puede resolver los problemas, especialmente a la luz de la quiebra que amenaza a varios de ellos”.
En este sentido, Ahmed Bfarkan, coordinador nacional de la Asociación Nacional de Propietarios de Cafés y Restaurantes de Marruecos, afirmó: “Los propietarios de cafés han perdido la pasión y la esperanza de atraer más clientes con motivo de los grandes eventos deportivos y manifestaciones. Esto se debe a que los beneficios que pueden obtener en estas ocasiones no pueden resolver los problemas del sector, que se debate en una serie de dificultades y limitaciones que ningún evento especial puede aliviar su impacto”.
"Alrededor del 40 por ciento de los propietarios de cafés y restaurantes están esperando a que finalice la Copa Africana de Naciones para cerrar sus puertas y declararse en quiebra"; "las regiones de Gran Casablanca, Rabat-Salé, Fez-Meknes y Tánger-Tetuán han registrado cifras alarmantes en cuanto a la quiebra de propietarios de cafés y restaurantes durante el último tercio del año pasado”.
Entre los problemas, se cita “la ausencia de una ley que regule el sector, y las restricciones asociadas a la declaración de empleados al Fondo Nacional de Seguridad Social, además de las auditorías fiscales realizadas por algunos grupos locales, y luego los altos impuestos y los aleatorios tarifas conocidas por el sector, especialmente la competencia de los propietarios de cafeterías móviles”. También señaló “el problema de los altos precios de las materias primas y la inflación, que afectaron el poder adquisitivo de varios ciudadanos que han renunciado a sentarse en los cafés ante esta situación”.
“Los cafés y restaurantes perdieron un gran número de clientes que solían acudir a ellos para ver los partidos, especialmente después de la crisis del Covid, que obligó a muchos a comprar paquetes para ver estos partidos desde sus casas. "Para hacer avanzar este sector y garantizar su continuidad es necesario, ante todo, promulgar una ley organizada para luchar contra la aleatoriedad . Sin esto, los profesionales ya no podrán seguir trabajando en las condiciones actuales”.
“La situación que atraviesan los dueños de cafés y restaurantes los ha llevado a escribir al gobierno y a otros sectores ministeriales, encabezados por el Ministerio de Industria y Comercio y el Ministerio de Economía y Finanzas, para emitir un decreto de quiebra ante su imposibilidad de continuar y el deseo de varios de ellos de cambiar su actividad actual hacia actividades comerciales”.
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