Sucesos
Muere un hombre de 74 años por la fiebre Crimea-Congo tras la picadura de una garrapata
Participó en julio en una actividad cinegética en la localidad pacense de Helechosa de los Montes
Un hombre de 74 años ha muerto en Ávila por la fiebre Crimea-Congo tras participar en julio en una actividad cinegética en la localidad pacense de Helechosa de los Montes, donde sufrió la picadura de una garrapata
Un hombre de 74 años ha muerto en Ávila por la fiebre Crimea-Congo tras participar en julio en una actividad cinegética en la localidad pacense de Helechosa de los Montes, donde sufrió la picadura de una garrapata, han informado hoy fuentes de la Consejería de Sanidad de Castilla y León.
El Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III confirmó la infección por el virus Crimea-Congo del afectado, quien falleció ayer de madrugada en el Complejo Asistencial de Ávila.
El proceso infeccioso que sufrió el paciente le ocasionó fiebre elevada y un cuadro clínico que condujo al fallecimiento, han precisado dichas fuentes en un comunicado, según el cual, los Servicios de Epidemiología de la Junta de Castilla y León, en colaboración con el Complejo Asistencial de Ávila, están trabajando para identificar a los posibles contactos del fallecido e indicarles el seguimiento que se debe realizar.
Por su parte, las autoridades sanitarias extremeñas ya han tomado medidas para informar a la población y a sus profesionales sanitarios, con el fin de evitar posibles infecciones.
En el caso de que haya habido contacto estrecho, se debe vigilar periódicamente la temperatura corporal del afectado y comunicar al epidemiólogo de referencia cualquier cambio en su estado de salud, recuerda el comunicado, en el que se asegura que los servicios de epidemiología de ambas comunidades autónomas están en contacto permanente.
La fiebre de Crimea-Congo está causada por un virus, cuyo mecanismo de transmisión principal es la picadura de la garrapata del género 'Hyalomma', aunque también puede contagiarse a partir de un caso por contacto con sangre o fluidos del enfermo, de forma asimilable a la transmisión de otras enfermedades más comunes como la hepatitis B.
En 2016, se confirmaron los dos primeros casos de esta enfermedad en España, un hombre de 62 años que falleció tras el 25 de agosto tras sufrir la picadura de una garrapata que le transmitió la enfermedad en un paseo por el campo en un pueblo de Ávila, y la enfermera que le atendió durante su ingreso hospitalario, al entrar en contacto con sus fluidos.
Para prevenir las picaduras por garrapatas, las autoridades sanitarias, que en las últimas semanas han realizado una campaña informativa, han recordado la importancia de usar ropa y calzado adecuados durante las salidas al campo.
También han recomendado transitar por los caminos ya trazados y utilizar repelentes tanto para las personas como para los animales de compañía, además de retirar lo antes posible y de forma adecuada las garrapatas que se puedan haber fijado, preferentemente por parte de profesionales sanitarios. EFE
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