Operación del Papa: «No habrá traspaso de poderes. Trabajará desde el hospital»

Una vez más, la operación papal ha disparado los rumores en la opinión pública –y también en algunos foros eclesiales– sobre la capacidad de Francisco para continuar al frente de la Iglesia y una posible renuncia. El primero en zanjar cualquier tipo de especulación al respecto ha sido el «número 2» del Vaticano. El secretario de Estado de la Santa Sede, el cardenal Pietro Parolin, ha señalado que «no habrá absolutamente ninguna transferencia de poderes».

«El Santo Padre permanecerá en el hospital el tiempo necesario para la operación y luego reanudará su actividad, incluso desde la cama, al servicio de la Iglesia. Si hay cosas urgentes, se las llevaremos hasta allí», ha manifestado el «premier» vaticano antes de la intervención durante la inauguración del nuevo Centro de Peregrinos para el Jubileo 2025, un Año Santo convocado precisamente por Francisco.

Junto a la sentencia de Parolin, tal era la confianza del propio Papa en el buen resultado de esta operación que en días pasados confirmó la agenda de su próximo viaje a Portugal, del 2 al 6 de agosto, para participar en la Jornada Mundial de la Juventud. De la misma manera, la Santa Sede también anunció las fechas para volar a Mongolia, del 31 de agosto al 4 de septiembre, en el que será su viaje más alejado de Roma.

«Esperamos que se recupere, ha sido un luchador en estas cuestiones de salud», se ha mostrado confiado el presidente de los obispos lusos, José Ornelas, que siguen adelante con el «programa fijado» para el millón de jóvenes que se espera en Lisboa en esos días. «No hay un plan B, nuestro único plan es F, de Francisco», ha afirmado el presidente de la Fundación JMJ 2023, Americo Aguiar.

Desde España, los obispos también han invitado a la comunidad católica a rezar por la salud del Santo Padre. «Deseamos una pronta recuperación. Invito a todos a orar por él y por los médicos y personal sanitario que lo van a cuidar», solicita el presidente de la Conferencia Episcopal Española y cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, en un mensaje publicado a través de su cuenta de Twitter.